Presentada la candidatura del juez Baltasar Garzón al Nobel de la Paz
Dos asociaciones latinoamericanas apoyan la concesión del premio al magistrado "como un reconocimiento a su defensa de los Derechos Humanos", en una ceremonia marcada por la ausencia de miembros de la judicatura y la política
El acto de presentación de la candidatura del juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón al Premio Nobel de la Paz 2002, que ha tenido lugar hoy en el Círculo de Bellas Artes de Madrid (CBA), ha estado marcada por la ausencia de destacados miembros de la Judicatura y de la clase política, así como la del propio magistrado, del que previamente se conocía su incomparecencia.
Durante la ceremonia, conducida por los actores Sancho Gracia y José Sacristán, han alabado la trayectoria de Garzón los miembros del Comité de Honor de su candidatura Enrique Miret Magdalena, teólogo seglar, Federico Mayor Zaragoza, ex director general de la UNESCO, Manuel Molina, alcalde de la localidad natal del juez, Torres (Jaén) y el escritor y periodista Manuel Vázquez Montalbán.
Ante una sala abarrotada de público, se ha leído un escrito del juez en el que éste se congratulaba de la puesta en marcha, precisamente hoy, del Tribunal Penal Internacional, al que ha calificado como "la mayor iniciativa de paz del siglo XX", y en el que equiparó como crímenes contra la Humanidad los atentados suicidas palestinos y los ataque del Ejército hebreo bajo las órdenes del primer ministro israelí, Ariel Sharon.
Sobre éste último ha dicho que "socializar las represalias contra el pueblo palestino" supone un crimen de lesa humanidad. "Ningún atentado terrorista autoriza una respuesta alegal por parte del Estado israelí", expresaba el texto de Garzón, quien recordó que "las víctimas no son los líderes, Arafat y Sharon, sino el pueblo".
Iniciativa
La candidatura de Garzón al Nobel de la Paz es una iniciativa de la Fundación de Artistas e Intelectuales por los Pueblos Indígenas de Iberoamérica, nacida bajo el auspicio de personalidades como Joaquín Sabina o Luis Eduardo Aute y con sede en Madrid, y la Asocación Latinoamericana de Derechos Humanos, radicada en Quito, y cuenta con el apoyo del Ayuntamiento de Torres.
Estas asociaciones argumentan la candidatura de Garzón "como un reconocimiento a su defensa incansable de los Derechos Humanos y a su lucha contra la impunidad" y reconocen en el magistrado "un precedente en pro del establecimiento de la Corte Penal Internacional".
Estos méritos los ven identificados en "el procesamiento y detención de los responsables de crímenes de lesa humanidad de América Latina (como Pinochet), su apoyo a los pueblos indígenas de Iberoamérica (Guatemala), su lucha contra diversas formas de corrupción y defensa de la libertad de expresión".
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