Miles de personas se manifiestan en Beasain contra el último atentado de ETA
Representantes de todos los partidos, salvo Batasuna, acuden al llamamiento de Ibarretxe
Miles de personas han respondido esta tarde en Beasain al llamamiento del lehendakari, Juan José Ibarretxe, que había convocado a los ciudadanos a manifestar su repulsa por el asesinato ayer de los ertzainas Ana Isabel Arostegi y Javier Mijangos.
La marcha ha partido a las 19,30 horas del consistorio y, tras recorrer en silencio algunas calles céntricas de la localidad, se ha detenido unos minutos en el cruce donde fueron asesinados los agentes y ha acabado ante la comisaría de la Ertzaintza.
Tras una única pancarta en euskera con el lema ETA no, paz y libertad, encabezan la marcha el vicepresidente primero y ministro del Interior, Mariano Rajoy; el lehendakari, Juan José Ibarretxe; el diputado general de Guipúzcoa, Román Sudupe; el alcalde de Beasain, Jon Jauregi; el consejero de Interior, Javier Balza, además del presidente de la Junta de Andalucía y presidente del PSOE, Manuel Chaves, y del secretario general de UGT de Euskadi, Carlos Trevilla.
A la manifestación, que concluirá ante la comisaría de la Ertzaintza a la que estaban adscritos los asesinados también se han incorporado el presidente del Parlamento Vasco, Juan María Atutxa, y los responsables del PNV, Xabier Arzalluz; del PP, Carlos Iturgaiz; del PSE/EE, Nicolás Redondo; de EA, Begoña Errazti, y de IU/EB, Javier Madrazo.
parada ante el lugar del atentado
Corporativos de Beasain, excepto los de Batasuna; el rector de la Universidad del País Vasco, Manuel Montero; la Ararteko (Defensor del Pueblo vasco) en funciones Mertxe Agúndez; los ex lehendakaris Carlos Garaikoetxea y José Antonio Ardanza, y familiares de los ertzainas Iñaki Mendiluce y José Luis González Villanueva, muertos por disparos de Mikel Otegi en Itsasondo, también han secundado esta convocatoria de Juan José Ibarretxe.
Cuando la manifestación ha llegado al cruce de la carretera nacional N-I donde fueron asesinados los agentes, en una de cuyas isletas hay una ikurriña con crespón negro y numerosos ramos de flores, los manifestantes se han parado unos minutos y han aplaudido antes de reiniciar la marcha, momento en que se ha escuchado algún grito de Gora
gure Ertzaintza. Aurrera (Viva nuestra Ertzaintza. Adelante).
Los manifestantes han llegado a la comisaría de la Policía Vasca hacia las 20.20 horas y los dirigentes políticos han subido a un estrado, donde el alcalde de Beasain ha leído la moción aprobada hoy por el consistorio.
"Una vez más, ETA hace oídos sordos al clamor de los vascos asesinando seres humanos y sembrando la desolación en nuestra sociedad", ha señalado el alcalde, quien ha exigido a la banda el abandono definitivo de las armas.
Al concluir la marcha, un numeroso grupo de personas ha aplaudido al paso de un coche patrulla de la Policía Autonómica para hacerles llegar su apoyo y solidaridad.
Los restos mortales de Javier Mijangos se encuentran en el tanatorio de la localidad burgalesa de Miranda de Ebro y su funeral se oficiará mañana a las 11,00 en el vecino municipio de Bujero, donde residía con su mujer y su hijo de un año.
El cuerpo de Ana Isabel Arostegi está en el tanatorio de Algorta (Vizcaya) y la misa en su recuerdo se celebrará mañana a las 19,00 horas en la iglesia de San Pedro de Mungia, localidad en la que vivía con su marido y sus tres hijos.
Tensión en los plenos
Todos los grupos políticos del Ayuntamiento de Beasain (PNV, EA, PSE-EE y PP) excepto Batasuna, han aprobado una moción en la que condenan el atentado de ayer y advierten a ETA de que "los vascos jamás aceptarán la imposición de un proyecto en contra de la voluntad mayoritaria de la ciudadanía".
El texto ha sido fruto de un pleno de urgencia celebrado en el Ayuntamiento de esta localidad guipuzcoana durante el que los portavoces del PSE y del grupo PNV-EA reprocharon a Batasuna que no se sumara a esta condena por los asesinatos de los ertzainas Javier Mijangos y Ana Isabel Arostegi. La moción, que ha acordado declarar hoy y mañana días de luto en el municipio, exige a ETA el abandono definitivo de las armas.
El pleno se ha desarrollado con normalidad y sólo se han oído gritos aislados de "hipócritas", "cómplices" y "dejad las pistolas" cuando el portavoz de Batasuna, como siempre en estos casos, ha leído un texto alternativo en el que aseguró que "las denuncias estériles no valen más que para camuflar la responsabilidades de los demás".
En Mungia (Vizcaya), el pueblo natal de Ana Isabel Arostegi, ha habido insultos y rifirrafes, e incluso se ha llegado a las manos cuando los vecinos han increpado a los concejales de Batasuna con gritos de "¡Asesinos!", "¡Ilegalización!".
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