Muere a los 58 años Rafael Medina, duque de Feria
En 1993 ingresó en prisión por corrupción de menores y tráfico de drogas
Fuentes policiales todavía no han corroborado la hipótesis del suicidio, pero la autopsia del cadáver que se realizará mañana en el Instituto Anatómico Forense, aclarará el motivo de la muerte del duque.
El portero del palacio sevillano Casa Pilatos en el que vivía el duque lo ha encontrado muerto esta mañana cuando le llevaba el periódico como hace habitualmente, según ha explicado a un grupo de periodistas una vecina amiga de la familia.
Rafael Medina sufría fuertes depresiones desde que fue condenado por corrupción de menores y tráfico de drogas, por lo que ingresó en prisión en 1993. En 1995 salió de la cárcel y en 1998 intentó suicidarse cortándose las venas.
Biografía
Rafael Medina era el segundo hijo de Rafael Medina y Vilallonga y de Victoria Eugenia Fernández de Córdoba, duquesa de Medinaceli. Realizó estudios de Ciencias Económicas en Sevilla y Madrid, y más tarde se trasladó a Inglaterra, donde fue alumno de la London School of Economics y se ocupó fundamentalmente del patrimonio y negocios familiares.
Llevó la gerencia de la empresa de cuero artificial Cuerotex, creada por su padre y situada en la localidad sevillana de Pilas y accedió a los puestos de máxima responsabilidad de ésta cuando contaba algo más de 20 años.
El 14 de julio de 1977 Rafael Medina contrajo matrimonio con la modelo Nati Abascal Romero-Toro, a la que conocía desde que ella tenía 12 años, en la ermita de El Rocío, en el corazón de Almonte (Huelva).
Al casarse con el duque de Feria, Nati Abascal compartió uno de los títulos más antiguos de nuestro país, título concedido con la Grandeza de España por Felipe II en 1567 y que, desde 1739, pasó a ser un título secundario de la casa ducal de Medinaceli, a la que continúa unido.
Rafael Medina y Fernández de Córdoba además de duque de Feria, título que ostentaba desde 1969, era marqués de Villalba y Maestrante de la Real de Sevilla.
Una vida problemática
El duque de Feria vivió los últimos años de su vida envuelto en el escándalo por su implicación y condena en un caso de corrupción de menores.
Separado de la modelo Nati Abascal en 1988, de cuyo matrimonio nacieron Rafael y Luis, cuando ingresó en prisión en 1993 estaba unido sentimentalmente a la sevillana Mariló Fernández.
En octubre de 1990 fue puesto a disposición judicial después de que un grupo de prostitutas le acusaran de pagar sus servicios en un club del alterne sevillano, donde fueron detenidas varias personas en una operación antidroga.
El 6 de marzo de 1993 ingresó en la prisión Sevilla-1 por orden de la juez María de la Oliva Morillo Ballesteros, acusado de rapto de una niña de 5 años, y de un delito contra la salud pública -tráfico de drogas-. Unos días antes el duque de Feria había declarado en la revista Hola : "Me encantan las mujeres. Son mi única droga. Lo malo es que me gustan las jóvenes y ya voy a cumplir 51 años".
Durante la instrucción del sumario, a mediados de mayo la revista Interviú publicó un reportaje en el que aparecían fotografías de Rafael Medina y varias niñas desnudas, por lo que fue llamado a declarar y se le acusó de un nuevo delito de corrupción de menores.
Recurrió la sentencia condenatoria de 18 años ante el Supremo, quien rebajó la pena el 15 de febrero de 1995 a 9 años, argumentando eximente incompleta de drogadicción y psiquismo.
Accedió al segundo grado penitenciario el 3 de julio de 1995 y días después solicitó trabajar en la lavandería del penal Sevilla 1 para redimir parte de la condena.
El 2 de mayo de 1998, Rafael Medina salió de la cárcel en libertad condicional tras más de cinco años en prisión, pero tuvo que volver de nuevo al calabozo apenas diez días después por conducir ebrio en una calle sevillana y causar heridas a tres mujeres. Poco después, en diciembre del mismo año, protagonizó un intento de suicidio cortándose las venas.
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