_
_
_
_
ESTADO DE LA NACIÓN

Zapatero aboga por una política de cohesión y de recuperación del sector público

Para el líder de la oposición, a Aznar se le "ha atragantado" la mayoría absoluta, responsabilizando a otros de los problemas que han afectado a España

Para Zapatero, España se cohesiona con políticas que fomenten el diálogo con las autonomías y, sobre todo, por la conversión del Senado en una "verdadera Cámara Territorial" un asunto para el que el dirigente socialista ha sugerido un plazo de seis meses.

En cuanto a política exterior, Zapatero ha reprochado al presidente su falta de un proyecto para España, que está ahora más aislada que nunca en Europa y que no asume el liderazgo europeo hacia Hispanoamérica. Por ello, propone un debate parlamentario "para definir un proyecto común para Europa y para nuestra política de paz y seguridad".

Además, ha reprochado a Aznar su aceptación del escudo antimisiles de Bush, una idea "desfasada", sin consultar al Parlamento.

Más información
Aznar culpa al PSOE del fracaso en el diálogo sobre inmigración
Aznar y Zapatero eluden la confrontación abierta en su primer gran cara a cara
Aznar y Zapatero eluden la confrontación abierta en su primer gran cara a cara
Especial: Las claves del Debate sobre el estado de la nación
Texto íntegro: Consulte el texto íntegro del discurso de Zapatero

La economía ha sido otro de los temas tratados por Zapatero en su discurso. El líder socialista ha reconocido el crecimiento de la economía y del empleo en estos años, pero ha resaltado la escasa calidad de este último, en especial para los jóvenes, cuya expectativa de emancipación ronda los 30 años.

Asimismo, Zapatero ha advertido de los síntomas de fatiga que muestra la economía a día de hoy, cuyas causas son la inflación, la ausencia de una política ambiciosa de fomento de la investigación y el desarrollo (I+D) -en la que España está por debajo de la media europea y que afecta a la modernización del país- y la ausencia de competencia, debida a una deficiente liberalización de los sectores económicos, que han sido calificados como meras "privatizaciones".

En esta parte del discurso, Zapatero ha denunciado el "abandono de lo público" llevado a cabo por el Gobierno de Aznar. Ese abandono ha generado problemas de seguridad -escasez de policías-, de siniestralidad laboral -España cuenta con las cifras más altas de la UE- y de fracaso escolar -por el abandono de la escuela pública.

En cuanto a la política educativa, y además del aumento del fracaso escolar y del abandono de la educación pública, Zapatero ha mencionado el rechazo de la comunidad educativa a la nueva ley universitaria.

En el plano cultural, Zapatero ha recordado a Aznar que España es un país donde se consume poca cultura, por lo que hay mucho que hacer. Pero sobre todo se ha referido al estado de los medios públicos, que ha calificado de "insostenible", reclamando el fin de la manipulación informativa y rechazando la escasa calidad de la programación televisiva.

Por último, Zapatero ha abogado por una política cultural con los ojos puestos en Hispanoamérica, una comunidad con la que compartimos idioma y valores, algo que habría que fomentar "para dar más fuerza a la lengua de Cervantes".

Concretando sus propuestas, Zapatero ha abogado por un debate parlamentario "para definir un proyecto común para Europa y para nuestra política de paz y seguridad"; en pro de la cohesión territorial, Zapatero ha propuesto hacer del Senado una Cámara territorial, así como la creación de un sistema de evaluación de las políticas estatales sobre la cohesión del territorio; para la cohesión social, el líder socialista propone el fomento del empleo estable y seguro y una política de apoyo a las familias. Para la modernización, Zapatero ha propuesto un Plan de Convergencia para la Sociedad del Conocimiento y en Nuevas Tecnologías de la Información.

Nuevo talante

El estreno de Zapatero en un Debate del Estado de la Nación ha servido para hacer una defensa cerrada del "nuevo talante de hacer política" que ya anunciara al acceder a la secretaría general del PSOE en julio del año pasado. Por ello, el líder de los socialistas ha comenzado poniendo de manifiesto los pactos alcanzados con el Gobierno durante los últimos meses.

Los acuerdos en materia de terrorismo y de reforma de la Justicia han sido los primeros temas abordados por Zapatero. El secretario general de los socialistas se ha felicitado por la consecución de estos pactos, alabando la actitud del Gobierno. Sin embargo, para Zapatero su política pactista no excluye la crítica, y por ello los temas en los que no se ha logrado el consenso con el Ejecutivo han sido los primeros en la lista de reproches del dirigente socialista.

Zapatero ha dejado pasar su primera intervención sin citar el caso del ministro de Exteriores, Josep Piqué. Sí ha hecho alarde de su "nuevo talante" de hacer política diciendo que no intentaría "desestabilizar las instituciones para que ustedes tengan que irse".

Sin embargo, en su segunda intervención tras la réplica de Aznar, Zapatero ha instado al jefe del Ejecutivo a que "resuelva la situación" del ministro. "Espero que resuelva la situación, no le voy a pedir más que eso", ha dicho Zapatero, que ha deseado "lo mejor" a Piqué, porque es un tema "que nos debe preocupar a todos".

El tema en el que Zapatero cree que el Gobierno ha estado menos acertado es el de la inmigración, uno de los intentos frustrados del PSOE de lograr un consenso con el Ejecutivo. Zapatero ha especulado con las razones por las que Aznar no ha querido un Pacto por la Inmigración: si por "compromiso electoral, por un prejuicio ideológico o, lo que es peor, por un cálculo electoral".

Para Zapatero, la Ley de Extranjería es "papel mojado" y la política de inmigración, errática, ya que la realidad "ha obligado" al Ejecutivo a "rectificar una y otra vez". Entre estas rectificaciones, Zapatero ha mencionado la llamada operación Ecuador, que preveía pagar el viaje a Ecuador de miles de inmigrantes ilegales para que regularizaran su situación, asunto en el que el Gobierno ha tenido que modificar su posición.

No obstante, el PSOE sigue dispuesto a alcanzar pactos en este asunto y también en el de la financiación autonómica, en el que advierte buenas señales por parte del Ejecutivo.

Mayoría absoluta

El "nuevo talante" ha hecho que Zapatero pasase de puntillas sobre los problemas más acuciantes que han afectado a España en los últimos 12 meses y los que más posibilidades ofrecían para el ataque al Ejecutivo. El líder socialista se ha limitado a enumerar asuntos como la reforma universitaria, las vacas locas, la ruptura de las negociaciones entre sindicatos y patronal para la reforma laboral, problemas judiciales como el aumento del sueldo de los funcionarios o el caso Liaño, que han centrado la información en los últimos meses.

La gestión gubernamental de estos asuntos sólo demuestra para Zapatero que se le "ha atragantado" la mayoría absoluta, ya que el Gobierno se ha limitado a cargar en otros la responsabilidad, lo que implica "gestos de desconfianza en la sociedad". Y, a medida que crece la "ineficacia", mayor es la "arrogancia" del Gobierno, que opta por descalificar las propuestas de los demás.

EFE

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_