El nuevo plan de ayudas al coche eléctrico de 400 millones no cubrirá la lista de espera generada con el Moves

El nuevo plan de ayudas directas a la compra confeccionado por el Gobierno y anunciado este miércoles por el presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez, tiene letra pequeña. Según confirman varias fuentes a este periódico, el flamante Plan Auto +, dotado con 400 millones y que entrará en vigor el próximo 1 de enero, no cubrirá la demanda del Plan Moves que todavía no ha sido resuelta y está en lista de espera. Estas fuentes apuntan a que el Plan Auto+ partirá de cero en 2026 y que, a diferencia del Moves, tampoco servirá para dar ayudas a los puntos de recarga de particulares, sino que se centrará exclusivamente en la compra de coches eléctricos e híbridos enchufables. El presidente fue claro en este sentido, al señalar que hay que ayudar “a la clase media trabajadora a comprar un coche eléctrico”.

Personas cercanas al proceso de negociación apuntan a que la idea del Ejecutivo es que los puntos de recarga personales sean subvencionados, si es que procede, por las marcas o las autonomías. El Gobierno se centrará en ayudar a incrementar la red pública de puntos de recarga existente, sobre todo en carretera, donde hacen falta estaciones de carga rápidas y ultrarrápidas, y en la que a día de hoy hay muchos trayectos que no están cubiertos de forma adecuada. Para ello, se destinarán los 300 millones del Moves Corredores anunciados por Sánchez.

Si bien se acaba de anunciar, el Ejecutivo sigue trabajando actualmente en la confección del Plan Auto+, por lo que todavía no está del todo claro, por ejemplo, cómo se dará respuesta a las solicitudes en lista de espera, aunque fuentes del Ejecutivo señalan en que trabajarán para que todos cobren su ayuda. Fuentes conocedoras apuntan a que la lista de espera del Moves asciende a unos 300 millones de euros, contando las subvenciones a la compra de vehículos electrificados (eléctricos e híbridos enchufables) y puntos de recarga. Otro aspecto que no está claro todavía es la cantidad de ayudas que se ofertarán a los solicitantes: con el Moves, para los eléctricos puros, la ayuda ascendía a 7.000 euros si se incluía el achatarramiento de un vehículo viejo y a 4.500 euros sin achatarramiento.

Cabe recordar, a su vez, que el Moves era un programa de Transición Ecológica, que luego repartía los fondos entre las autonomías, mientras que el nuevo plan estará bajo el ala de Industria y se gestionará de forma centralizada, sin implicación de las autonomías, tal y como adelantó este medio el mes pasado. Sacar de la ecuación a las autonomías era una petición del sector, que en líneas generales ha quedado satisfecho con los nuevos fondos, que incluyen también un nuevo Perte para el Vehículo Eléctrico y Conectado en 2026 que estará dotado de 580 millones.

El Plan Auto+ se basa en la experiencia positiva del Plan Reinicia Auto+ de la Comunidad Valenciana, que sirvió para ayudar a aquellas personas que habían perdido su coche durante la dana de octubre del año pasado. Este programa, alabado por el sector por su rapidez en la entrega de las subvenciones, con una espera media de un mes (frente a los 18 meses del Moves), ha disparado el mercado en la región, llevando a la Comunidad Valenciana a aumentar sus ventas un 44,8% entre enero y noviembre, cuando el conjunto del mercado español creció un 14,7%, según datos de Anfac, la patronal nacional de automovilísticas.

El último Moves, anunciado el 1 de abril, llegó en un momento de incertidumbre para el automóvil, que se había quedado sin ayudas a la compra por la caída del decreto ómnibus en enero de 2025, en el que se incluían un popurrí de medidas. Eso puso en pie de guerra al sector, que alertó en el primer trimestre de que los pedidos se habían supuestamente paralizado por la ausencia de subvenciones. Lo cierto es que las ventas de electrificados (incluyendo eléctricos e híbridos enchufables) se dispararon entre enero y marzo, y continuaron en esa línea durante todo 2025, con una subida del 100,1% hasta noviembre, es decir, que se duplicaron. Este extraordinario comportamiento del mercado español se produjo a pesar de que el Moves 2025, que también se dotó de 400 millones, duró poco, ya que a finales de verano muchas comunidades autónomas avisaron de que se habían agotado los fondos.