Comercio, finanzas y educación lideran las subidas salariales pactadas en los convenios

Más de 9,2 millones de asalariados ya habían pactado o revisado en julio sus condiciones laborales para este año en sus respectivos convenios colectivos. Entre las condiciones estaba un incremento salarial medio acordado para estos asalariados del 2,99%, una cantidad prácticamente idéntica a la del primer semestre (2,98%), según las cifras de la estadística de convenios colectivos publicada este jueves por el Ministerio de Trabajo.

El avance promedio de los sueldos implica que los asalariados seguirían perdiendo hasta julio algo de poder adquisitivo, ya que la inflación media de los últimos doce meses —que es la que se aconseja utilizar para eliminar la estacionalidad— se situó en el 3,2%. Se trata, por tanto, de una pérdida de capacidad de compra de apenas dos décimas.

Pero eso no sucede en todos los sectores. Según los últimos datos del ministerio, cuatro actividades que lideran las subidas salariales promedias han pactado subidas de sueldos por encima de la evolución media de los precios. Es decir, que sus empleados no están perdiendo poder de compra. Es el caso del comercio, donde casi 1,5 millones de asalariados cuentan con un incremento retributivo medio pactado hasta julio del 3,33%. También de las actividades administrativas, en las que 675.500 empleados se encontrarán con una subida salarial media del 3,36%. E igualmente sucede con el sector de banca y seguros, donde algo mas de 187.000 trabajadores han acordado subidas del 3,61%; y en la educación, cuyos poco más de 102.000 asalariados son los que han pactado mayores incrementos hasta la fecha, del 3,86%.

También ganan poder adquisitivo ahora mismo los trabajadores que tienen como referencia un convenio colectivo que se ha firmado en 2024, ya que el aumento salarial medio en estos nuevos acuerdos se situó en el 3,95% para casi un millón de asalariados. Los 8,3 millones restantes que recoge la estadística, con convenios firmados en años anteriores pero con efectos en este año, tienen alzas salariales medias del 2,88%. Aún menores son las subidas pactadas en los convenios de empresa (un 2,75%, con afectación sobre 423.000 personas) y, por el contrario, los mayores aumentos se dan en los acuerdos sectoriales de ámbito superior a la empresa firmados en 2024 (un 3,97% para 885.385 trabajadores).

Los sectores con menores alzas pactadas son los de Administración pública (1,99%); suministro de energía eléctrica, cuyos sueldos están entre los más altos de todas las actividades, pero los incrementos pactados están entre los más bajos (2,1%); y las actividades artísticas y recreativas (2,2%).

Este mayor ajuste entre los aumentos salariales pactados y la evolución de los precios se está traduciendo en que los trabajadores con cláusulas de revisión salarial hayan empezado a disminuir, después de años aumentando para compensar las pérdidas de poder adquisitivo que generó la crisis inflacionaria iniciada en la segunda mitad de 2021. Así, hasta julio, un total de tres millones de trabajadores de los 9,2 millones con convenio ya pactado tenían incluidas en sus condiciones salariales una cláusula de revisión para actualizar sus salarios parcial o totalmente según la inflación. Esto supone un 32% de todos ellos, lo que supone una reducción frente al 35% que llegó a representar en 2023 este colectivo de trabajadores con cláusula.

La estadística recoge también los casos de empresas y trabajadores afectados por las llamadas inaplicaciones o descuelgues de convenios. Es decir, aquellos casos en los que la ley y la negociación entre las compañías y los representantes de los trabajadores, debido a situaciones de crisis, permite que no se apliquen las condiciones generalmente salariales, de horario o jornada, a las que obliga su convenio de referencia. Entre enero y julio, un total de 16.356 trabajadores se vieron afectados por esta inaplicación de sus convenios de referencia, lo que supuso un 8,6% menos que en el mismo periodo del año anterior.

La mayoría tiene jornadas de menos de 40 horas

Asimismo, otro aspecto regulado en los convenios y que se incluye en los datos es la jornada media pactada en los convenios. De los 9,2 millones de trabajadores afectados por estos acuerdos colectivos, una mayoría de cinco millones tiene una jornada semanal de entre 38,5 a 39,5 horas semanales (una jornada media anual de 1.783,30 horas). Mientras que el siguiente colectivo más numeroso es el formado por 2,5 millones de trabajadores cuya jornada media es de 1.738,64 horas al año, lo que equivale a trabajar entre 37,5 a 38,5 horas).

Estos datos son los que llevan a los empresarios a argumentar, durante las negociaciones que se están llevando a cabo para reducir la jornada laboral máxima de 40 a 38,5 horas semanales en 2024, y a 37,5 horas a partir de 2025, que un buen número de asalariados ya tienen jornadas laborales por debajo del tope máximo legal. Aunque el Ejecutivo y los sindicatos argumentan que es precisamente para los trabajadores con peores convenios o incluso sin ellos para los que quieren reducir el número de horas que se puede trabajar como máximo a la semana.

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