Los jóvenes se despiden de Verse y ya buscan sustituto

Uno paga la cena; otra le envía su parte con el móvil al instante. También dividen los gastos de un regalo, un viaje o un festival. Los jóvenes de 18 a 24 años son los que más usan el móvil como medio de pago a diario, según el Banco de España. Disponer de dinero propio y poder enviárselo a quien sea en pocos segundos sin tener que saber su número de cuenta se ha convertido en una necesidad. Y Verse era una opción.

“Yo los usaba mucho, sobre todo cuando éramos pequeños, cuando nadie tenía Bizum”, explica Paula, de 20 años. Nicolás detalla: “Todo mi círculo tenía Verse, y Bizum no me hacía falta”. A finales de 2022, esta aplicación nacida en Barcelona contaba con más 1,8 millones de clientes en Europa. Ahora los adolescentes se despiden de Verse y tienen hasta el 13 de septiembre para retirar el dinero. No lo ven como un drama. Las alternativas son muy variadas. Solo Bizum, su principal competidor, cuenta con más de 20 millones de usuarios.

”No tomamos decisiones como esta a la ligera, ya que sabemos que afectan a nuestros clientes, nuestros socios y a los miembros de nuestro equipo”, señala la compañía en un comunicado publicado en su página web. Lo que diferenciaba a esta app del resto de las aplicaciones financieras es que, además de las funcionalidades típicas de un banco, también ofrece otras más propias de una red social: creación de grupos, organización de eventos, personalización del nombre de usuario, juegos, concursos o un feed social para conectar con amigos.

Verse, que echó a andar en 2016, explica su cierre por no haber “podido identificar una ruta sostenible” que les “permita seguir creciendo”. A diferencia de Bizum, que nació el mismo año por la colaboración entre varios bancos españoles, Verse generaba un monedero digital, independiente de una cuenta bancaria, para recibir, guardar y enviar dinero a otros usuarios. También permitía vincular una tarjeta o pedir una de Verse que quedaba enlazada y se podía usar como una tarjeta corriente.

La flexibilidad de su uso (no era necesaria la vinculación a ningún banco), y las bajas comisiones, contribuyeron a su popularidad en un momento en que Bizum no estaba tan extendido como ahora. Algunos empezaron a usarla antes de la mayoría de edad, porque solo necesitaban la autorización de sus padres. “Era una manera muy cómoda y accesible de manejar el dinero como adolescentes”, asegura una usuaria de 17 años. Un chico un año menor que ella, y que usa la aplicación desde hace años, explica que para usarla: “No te pedían ser mayor de edad”. Aunque lamenta su cierre, cree que tanto él como sus amigos encontraran otros sistemas: “Buscaremos alternativas, aunque, la verdad, echaremos de menos Verse”, concluye.

El hecho de no tener que vincular la cuenta de Verse a ningún banco también era llamativo para otro perfil de usuarios. “Es una jugada que la cierren, porque iba muy bien para mover dinero entre cuentas con una comisión muy pequeña”, explica Sebas (23 años). Según él, Verse era una alternativa a Bizum porque con esta “no puedes mover [dinero] desde cualquier cuenta bancaria, sino que tienes que tener la cuenta fijada con un único banco”. Este usuario también usaba la tarjeta virtual de Verse para “hacer pagos baratos en páginas que son dudosas”.

Mientras tanto, Bizum se ha convertido casi en el estándar en la industria. Además, varias entidades bancarias ya ofrecen productos y cuentas destinadas a menores de edad y algunas de ellas se orientan exclusivamente el público joven. Verse cerrará el 13 de septiembre de 2023. Pasado ese día, asegura la compañía catalana, el dinero “seguirá estando protegido y habrá un proceso establecido” para retirar el dinero, pero aseguran que las solicitudes después del cierre de la aplicación “serán significativamente más lentas”.

Además de en España, Verse opera en Alemania, Austria, Bélgica, Bulgaria, Chipre, Dinamarca, Eslovaquia, Eslovenia, Estonia, Finlandia, Francia, Grecia, Hungría, Irlanda, Islandia, Italia, Letonia, Liechtenstein, Lituania, Luxemburgo, Malta, Noruega, Países Bajos, Polonia, Portugal, Chequia, Rumanía y Suecia.

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