Los inspectores de Trabajo convocan tres días de huelga por las “promesas incumplidas” del Gobierno

La Inspección de Trabajo ha convocado, por primera vez en su historia, tres días de huelga para protestar por las “graves deficiencias” de un organismo que sigue sin reforzarse a pesar de los compromisos adquiridos por el Gobierno. Hace año y medio, los Ministerios de Trabajo —del que depende— y Hacienda y Función Pública —encargado de la gestión de los empleados públicos— firmaron un acuerdo con el que se comprometían a reforzar tanto en personal como en medios al que resulta un servicio clave en la lucha contra las malas prácticas laborales. Sin embargo, los sindicatos CC OO, CIG, SITSS, SISLASS y USESS aseguran que nada de lo acordado entonces se ha llevado a cabo, y señalan que las deficiencias de la Inspección “son cada día más severas y más palpables”. Por ello, han convocado tres días completos de huelga para el 21 de diciembre de 2022, y 25 de enero y 22 de febrero de 2023.

“Ni el Ministerio de Trabajo, ni tampoco el Ministerio de Hacienda y Función Pública se quieren hacer responsables de la falta de soluciones en un servicio como la Inspección de Trabajo y Seguridad Social, que soporta graves deficiencias desde hace años”, señala el comunicado elaborado conjuntamente por los cinco sindicatos, y que ha sido difundido este jueves, junto con el justificante del preaviso de la convocatoria de huelga. “Llevan año y medio analizando el conjunto de soluciones acordadas con la parte social el 7 de julio de 2021. No es creíble que un modesto grupo de medidas básicas, aunque capaces de establecer un primer grupo de soluciones a las numerosas deficiencias que se manifiestan en la Inspección de Trabajo y Seguridad Social puedan requerir, en su análisis, semejante periodo salvo que se trate de la excusa para incumplir el acuerdo adoptado”, denuncian en la nota.

En el acuerdo de julio, la Administración General del Estado se comprometió a reforzar la plantilla de la Inspección con la contratación inmediata de 200 interinos y a entregar una dotación de 6 millones en concepto de productividad para los trabajadores. “Es necesaria más plantilla; mejorar las dotaciones técnicas y materiales; dotarse de instrumentos propios para responder a la complejidad del mundo laboral actual”, han venido reclamando desde entonces los sindicatos. La vicepresidenta y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha señalado en distintas ocasiones que es necesaria “una inspección fuerte, capaz de afrontar con la misma solvencia que hasta ahora la complejidad que continúa adquiriendo el mundo del trabajo y el impacto en este de las nuevas tecnologías”. Sin embargo, los sindicatos critican estos mensajes en tanto que entienden que no se han llevado a la práctica.

Todos los centros

“Es peligroso que desde los niveles políticos se engorde el discurso en defensa de la Inspección sin que los compromisos y actuaciones desde dichos niveles vayan en la misma dirección. Crear ilusión, a sabiendas de que se van a frustrar las expectativas que se creen, es la fórmula más efectiva para minar el buen funcionamiento de cualquier organización y, desgraciadamente, eso es lo que se está haciendo en el ámbito de esta institución”, critican los cinco sindicatos convocantes. “La representación de los trabajadores no podemos permanecer impasibles observando como languidece la Inspección y como se diluye el esfuerzo que cada día realiza la plantilla para dar respuesta a los servicios que demanda la ciudadanía”, añaden.

Los paros emplazados serán de 24 horas y afectarán a todos los centros de trabajo de la Inspección a nivel estatal. Estarán convocados a su seguimiento la totalidad de la plantilla del organismo, “tanto personal actuante como personal técnico/administrativo, tanto personal funcionario como personal laboral, personal fijo de carrera y personal temporal o interino”, recoge el justificante presentado ante Hacienda. Según los últimos datos oficiales del ministerio, la Inspección de Trabajo cuenta con 2.968 empleados, de los que 2.873 son funcionarios de carrera.