Garamendi acaricia su segundo mandato al frente de la CEOE
El líder de los empresarios llega a las elecciones con más apoyos que Guinda, su rival por la presidencia, en un clima enrarecido en los últimos días
La Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) decide este miércoles quién estará al frente del organismo de representación de los empresarios durante los próximos cuatro años. El actual presidente, Antonio Garamendi, y la vicepresidenta de la patronal catalana (Foment del Treball), Virginia Guinda, se disputan el sillón de mando de Diego de León 50. A falta de que se vea reflejado en las urnas, el líder vasco llega a los comicios con un respaldo mayor que el de su rival.
Más de 700 vocales están llamados a depositar su voto (secreto) en las urnas a partir de las nueve de la mañana, aunque no será hasta alrededor de la una y media de la tarde cuando se proceda a anunciar el nombramiento del ganador. Las quinielas apuntan a una victoria holgada por parte de Garamendi, y, en el mejor de los casos, conceden un respaldo máximo del 20% para Guinda.
La de este miércoles será la tercera vez en la que Antonio Garamendi (Getxo, 64 años) se postule a la presidencia de la CEOE. Lo hizo por primera vez en 2014, cuando perdió por tan solo 34 votos ante Juan Rosell. De los 660 sufragios que se emitieron aquel año, el vasco obtuvo el respaldo del 47,2% de los vocales. Tras permanecer como número dos de Rosell, Garamendi, entonces presidente de la asociación de pequeñas y medianas empresas Cepyme, sucedió al empresario catalán, sin oposición, en 2018.
Desde entonces, ha ocupado el cargo de presidente de la CEOE, viéndose inmerso, especialmente en los dos últimos años, en uno de los periodos más convulsos del diálogo social. La irrupción del coronavirus, que contrajo la economía a causa de las restricciones sanitarias, y la invasión rusa de Ucrania, que ha disparado la inflación, han obligado al órgano de representación de los empresarios a negociar con el Gobierno y los sindicatos desde el despliegue de los ERTE, o la subida del salario mínimo hasta una reforma laboral. De hecho, la manera en la que la CEOE abordó internamente la negociación del nuevo marco laboral despertó el rechazo de algunas patronales territoriales. Es el caso de Foment del Treball, de la que Virginia Guinda (Barcelona, 48 años) es vicepresidenta y que ha ejercido el papel de oposición dentro de la patronal.
Garamendi cuenta a su favor con el respaldo de organizaciones como ATA, Confemetal, CEIM, Ganvam, Asedas, CEG o Ceaje, además de otras patronales territoriales. Guinda, por su parte, presentó 37 avales el pasado 8 de noviembre, 15 días antes (el límite temporal máximo que establecen los estatutos) de que se celebrasen las elecciones. Aunque su candidatura está impulsada desde Foment, en el entorno de la empresaria catalana aseguran haber mantenido múltiples reuniones con distintas patronales (incluso aquellas que ya se han posicionado públicamente del lado de Garamendi), y se muestran “optimistas” de cara a la votación final.
Diversas fuentes patronales consultadas por EL PAÍS no creen que vaya a saltar la sorpresa esta tarde en el Auditorio Nacional de Música de Madrid, que acogerá los comicios. Consideran que la figura de Guinda carece del “empaque suficiente” para comprometer la reelección de Garamendi. A pesar de que algunas de estas fuentes reconocen haberse sentido decepcionadas por la gestión del vasco en algunos momentos, especialmente por la relevancia que han adquirido figuras como Fátima Báñez, exministra de empleo y ahora presidenta de la Fundación CEOE; o Íñigo Fernández de Mesa, presidente del Instituto de Estudios Económicos (IEE) y vicepresidente del organismo, a las que consideran “paracaidistas”, no creen que ese malestar vaya a trasladarse a las urnas.
Tensión final
Durante su campaña, Guinda, consejera delegada de Iberboard, empresa del sector del papel y cartón reciclado, ha recalcado que de ser elegida transformaría el modo en el que la CEOE ha venido tomando sus decisiones en los últimos años, dando mayor relevancia a las organizaciones sectoriales o territoriales. “La CEOE debería de ser capaz de funcionar de esta otra manera, asegurando una escucha más activa a las bases. A partir de esa escucha debe generarse una fluidez en la comunicación y un debate interno de los temas. Debemos decidir conjuntamente cuáles son los asuntos sobre los que necesitamos que nuestra patronal se pronuncie y represente esos intereses”, señaló en una entrevista para EL PAÍS tras registrar oficialmente su candidatura a la presidencia.
Aunque no se ha producido ningún debate entre los candidatos y el tono ha sido cordial (al menos públicamente) entre ambos, lo cierto es que la tensión entre las dos candidaturas se ha agudizado en los últimos días. Desde el bando de la empresaria catalana se ha acusado a la CEOE de impedir que pueda dirigirse a los vocales antes de emitir su voto. Mientras que Garamendi sí que podrá hacerlo, al ser el encargado de inaugurar la Asamblea Electoral por su condición de presidente. Fuentes de la patronal niegan, sin embargo, que vaya a hacer uso de ese turno de palabra para lanzar ningún último mensaje a los votantes.
De revalidar la confianza de las organizaciones patronales, Garamendi comenzará su segundo y último mandato al frente del organismo, puesto que los estatutos de la confederación prohíben una permanencia mayor de ocho años en el cargo. Si Guinda da la sorpresa y logra el sorpasso, se convertirá en la primera mujer en ostentar la presidencia de la CEOE. El órgano de representación de los empresarios se fundó en 1977 y desde entonces ha tenido cinco presidentes, todos hombres: Carlos Ferrer (1977-1984), José María Cuevas (1984-2007), Gerardo Díaz Ferrán (2007-2010), Juan Rosell (2010-2018) y el propio Garamendi.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.