Un juzgado de Madrid admite a trámite una querella contra Dimas Gimeno por presunto espionaje

El juzgado de instrucción número 35 de Madrid ha admitido a trámite una querella contra el expresidente de El Corte Inglés Dimas Gimeno por extorsión, revelación de secretos y organización criminal durante su etapa al frente de la cadena de grandes almacenes. Los querellantes —el exdirector de comunicación del grupo Ángel Barutell, su esposa Gloria Allende y el periodista Eulogio López— sostienen que Gimeno clonó sus teléfonos móviles, espió a consejeros de El Corte Inglés y que contrató a la agencia israelí NSO Group, fabricante del programa Pegasus.

Dos de los tres querellantes confirmaron este martes a EL PAÍS que el caso ha sido admitido a trámite, según adelantó Voz Pópuli. Las acusaciones también van dirigidas contra Miguel Ángel Gimeno, hermano de Dimas Gimeno, y su madre María Antonia Álvarez. Fuentes cercanas al expresidente de El Corte Inglés, que encabezó el grupo entre 2014 y 2018, han negado que este haya utilizado o mandara utilizar ningún servicio para realizar labores de espionaje, y añadieron que por el momento no han recibido ninguna notificación del juzgado.

En un auto fechado el 6 de junio al que ha tenido acceso Efe, la magistrada Inmaculada Lova ha aceptado abrir una investigación, sin entrar en el fondo de las acusaciones, para tomar declaración a los querellantes en los próximos días. La acusación mantiene que, en 2018, durante el enfrentamiento de Dimas Gimeno con varios miembros del consejo de administración de la compañía, que culminó con su destitución, su hermano se valió de engaños para manipular e intervenir teléfonos móviles de Barutell (que fue jefe de comunicación de los grandes almacenes durante 40 años), su esposa y Eulogio López, director del medio digital Hispanidad. Estos aseguran que el alto ejecutivo les pidió ayuda en su batalla interna por el control de la compañía.

Con la excusa de comprobar si sus teléfonos estaban intervenidos, Miguel Ángel Gimeno —con la ayuda de su madre, María Antonia Álvarez, hermana del fallecido presidente de El Corte Inglés Isidoro Álvarez—, les habría convencido, siempre según los querellantes, para que le dejaran introducir una serie de claves, tras lo cual les aseguró que estaban “limpios”. En los días siguientes constataron que se producían hechos “extraños”, como el borrado de mensajes y duplicado de pantallas. Los tres querellantes aseguran que realizaron un análisis de sus teléfonos, que habían sido clonados, y de sus domicilios, donde comprobaron la existencia de micrófonos.

Los querellantes aseguran que, además, se recabó “información sobre miembros del consejo, fotos de relaciones extramatrimoniales, conversaciones de los consejeros más longevos comprometidas sobre el testamento”, que se pretendían emplear para “extorsionar a cuantos más miembros del consejo” de modo que Gimeno no fuera cesado. Las agencias de investigación que habría utilizado Dimas Gimeno son, además de NSO Group, Kroll e Inteligence Bureau, según la querella.

El supuesto espionaje se habría producido en medio de la batalla por el control de la empresa, durante la cual se presentaron una serie de demandas contra las herederas de Isidoro Álvarez, las hermanas Marta y Cristina Álvarez. Dichas demandas, añade la querella, tenían “el fin espurio de hostigar a estas jurídicamente para que María Antonia Álvarez y Dimas Gimeno pudieran vender sus acciones de El Corte Inglés”.