Las comunidades crean ocho de cada diez nuevos empleos públicos desde que estalló la pandemia

La plantilla de empleados públicos ha aumentado desde el comienzo de la pandemia en algo más de 130.000 personas y las comunidades autónomas han concentrado ocho de cada de diez de estas nuevas contrataciones, según se desprende de los datos que componen el último Boletín Estadístico del personal al servicio de las Administraciones Públicas. Las cifras, correspondiente al mes de julio de 2021, han sido publicadas este lunes. Los refuerzos en sectores como la sanidad y la educación, dependientes de los gobiernos territoriales y a los que la pandemia ha llevado hasta el límite en los dos últimos años, han condicionado un aumento de la plantilla pública que la ha situado muy próxima a los tres millones de trabajadores (2.728.749).

A comienzos de 2020, algo más de dos millones y medio de trabajadores públicos (2.597.712) se dieron de bruces con el virus. Y, a pesar del varapalo sanitario y económico que supusieron las restricciones a la movilidad, y que comprometieron la adecuada atención pública especialmente durante el confinamiento, ese mismo año tan solo se registraron 769 incorporaciones, según los archivos estadísticos del Ministerio de Función Pública para el mes de julio (estos se publican solamente a comienzos y mediados de año).

Sin embargo, un año después las cosas cambiaron. Ante la incesante reclamación de un refuerzo de las instituciones públicas, el cómputo de trabajadores para el mes de enero de 2021 arrojó un aumento de 112.693 empleados públicos, que siguió elevándose aún más a finales de año con un refuerzo extra de 18.344 personas. En total, en ese periodo de dos años desde la irrupción de la pandemia y hasta el final del año pasado, el número de trabajadores públicos se incrementó en 131.037, centralizándose, como sucede año tras año, en las plantillas de las comunidades autónomas.

De estos más de 131.000 nuevos trabajadores públicos, 110.685, el 84,46%, fueron contratados por la Administración general y las Universidades dependientes del sector público de las comunidades autónomas; mientras que 16.719 corrieron a cargo de la Administración Local (ayuntamientos, diputaciones, cabildos y consejos insulares) y los 3.633 restantes fueron a parar a las distintas instituciones del Estado.

En cuanto a la distribución por territorios, las comunidades autónomas que presentan un mayor número de empleados públicos en términos absolutos son Andalucía (507.607), Cataluña (332.823) y Madrid (417.686). En el ránking de personal al servicio de las Administraciones Autonómicas o locales también son estos mismos territorios los que cuentan con un mayor despliegue de personal, mientras que en cuanto a las personas que trabajan para el Estado también se concentran mayoritariamente en Madrid, Andalucía y Comunidad Valenciana.

En cuanto a la tipología de sus trabajadores, el boletín refleja que hay más hombre que mujeres en la función pública (1.157.410 frente a 1.571.339); y que un 53,62% de la plantilla es personal funcionario de carrera, un 22,36% es personal laboral y que el resto (interinos, eventuales y otro personal), supone el 24,02% restante. Además, el envejecimiento de la plantilla pública sigue siendo otro de los problemas que arrastra el empleo público, puesto que el 43,54% de ellos, el porcentaje mayoritario, tiene entre 50 y 59 años.