Los bancos han concedido ya 788.000 moratorias de crédito hipotecario y de consumo por 33.000 millones

La magnitud de esta crisis se puede medir por muchas variables macroeconómicas, pero una buena forma de saber cómo está afectando a los ciudadanos y a las familias es conocer las peticiones de moratoria en los créditos. Hasta el 31 de mayo, las entidades financieras españolas han concedido 787.921 moratorias hipotecarias y no hipotecarias (al consumo) a los afectados por la crisis del coronavirus, con un saldo vivo pendiente de amortización de casi 33.000 millones, según los datos publicados este jueves por el Banco de España. Esta cifra supone que se ha retrasado el 5% del crédito concedido a los hogares.

Esta información incluye tanto las moratorias hipotecarias y las de préstamos sin garantía hipotecaria que aprobó el Gobierno en su plan de medidas para mitigar el impacto de la covid-19, como los acuerdos de moratorias alcanzados entre los bancos y sus clientes a través de las patronales AEB, CECA y UNACC, complementarias a las moratorias oficiales. Para los tres tipos de moratorias, la gran mayoría de deudores beneficiarios y avalistas, más del 70%, son asalariados.

Los datos, que se actualizan cada mes, revelan que los clientes han pedido retrasar el pago de 986.000 créditos, una cifra sin precedentes en ninguna crisis anterior. De estas peticiones, se han aprobado el 80% y se han rechazo el 20%, según los datos oficiales. Sin embargo, en la nota de prensa de abril, las cifras de aprobación de solicitudes eran mucho menores. Así, en los créditos hipotecarios y los no hipotecarios se había dado luz verde a 124.000 préstamos y, un mes después, la cifra ha subido un 526.000, es decir se había multiplicado por cuatro. En abril no se disponía de los datos de las moratorias creadas por los bancos por lo que no se pueden comparar con las cifras de mayo.

Se despeja el atasco de peticiones

Fuentes del sector explican que la razón de este fuerte incremento en los aprobados de las solicitudes se debe a que muchas peticiones llegaron de golpe a las oficinas, que también están analizado las numerosas operaciones de créditos con avales del Instituto de Crédito Oficial (ICO), por lo que se produjo un atasco que ahora se despeja.

En cuanto al desglose, la nota del Banco de España apunta que a cierre de mayo se habían recibido 258.611 solicitudes de moratorias hipotecarias, de las que se han dado curso a 208.698 con un saldo vivo pendiente de 18.833 millones de euros.

Por otro lado, se registraron 383.320 peticiones en el marco de la moratoria legislativa de los contratos de crédito sin garantía hipotecaria, de las que se han tramitado 318.751, con un saldo pendiente de amortización de los préstamos suspendidos de 2.345 millones.

Por último están las solicitudes de moratorias establecidas por los bancos, que pueden ser de consumo o para la vivienda. Son complementarias a las del Gobierno y retrasan, por ejemplo, el pago el pago de la hipoteca hasta 12 meses en lugar de los tres meses marcados en el decreto ley. Estas operaciones han alcanzado las 345.506 peticiones, de las que se han dado curso a 260.472. El saldo pendiente de amortización de los préstamos suspendidos es de 11.748 millones de euros.

Destaca el dato de que más del 70% de los deudores beneficiarios y avalistas sean asalariados. En cuanto a los autónomos, los principales sectores beneficiarios de los tres tipos de moratoria son el comercio, la hostelería y otros servicios, seguidos a cierta distancia de actividades profesionales, científicas y técnicas, transporte y construcción. Estos sectores de actividad representan conjuntamente más del 75% del total de moratorias para autónomos a las que se ha dado curso hasta la fecha, según indica la nota.

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