El Gobierno y los autónomos pactan la subida de cuotas para el 2019

¿Qué subida tendrán entonces las cotizaciones? Ahora el 85% de autónomos paga sus cuotas según unas bases mínimas de cotización, que son de 932 euros en 2018. Sobre esta cantidad, el autónomo cada mes desembolsa un porcentaje (tipo) que va del 29,8% al 30,8%. Para acordar la subida de 2019, el Gobierno y los autónomos llevan semanas debatiendo qué alza aplicar a cada parte, es decir, a la base y al tipo. Según las grandes asociaciones del colectivo, en la reunión de hoy han pactado que la base subirá un 1,25% y el tipo al 30%.

Lorenzo Amor, presidente de la asociación de autónomos ATA, es quien ha anunciado que sí hay un acuerdo definitivo, y que esto supone un incremento de 6,5 euros al mes para la mayoría de los autónomos y de 7 euros para los autónomos societarios. El pacto se habría alcanzado por tres de las cuatro asociaciones presentes en la reunión, ha apuntado Amor.

El acuerdo, rubricado por tres asociaciones de autónomos (UPTA, ATA, CEAT) del que se desmarca UATAE, también supone un incremento de la tarifa plana que ahora pagan los autónomos durante los primeros compases de su actividad, que pasa de 50 a 60 euros mensuales.

Para mejorar esta situación de protección, el porcentaje de tipos de cotización de los trabajadores por cuenta propia irá aumentando progresivamente en los próximos cuatro años hasta alcanzar el 31% en 2022. Los autónomos que ahora deciden no pagar para tener derecho a cobrar si caen de baja, tienen un tipo del 26,5%. En cambio, si lo hacen, el tipo alcanza el 29,5%, y llega al 29,8% si también se quiere percibir una ayuda en caso de que tengan que cesar en una actividad.

Esta pequeña subida unida al salto del 22,3% de la base de cotización más baja del régimen general (está ligada al salario mínimo interprofesional) tiene una consecuencia: por primera vez desde los años ochenta la referencia mínima utilizada para calcular lo que cotizan los autónomos quedará por debajo de la usada para los asalariados.

En las últimas décadas esa referencia para los trabajadores por cuenta propia estaba por encima. Se fijó así para compensar la libertad que tienen los autónomos para elegir la base de cotización, lo que da pie a que el 85% elija la base mínima de cotización. En cambio, los asalariados no tienen esa opción ya que las cuotas a pagar están ligadas directamente al salario. Al invertirse la situación, se genera un nuevo incentivo a la subcontratación, ya que se abaratan los costes del empleo por cuenta propia, y, por extensión, al aumento del fraude a través de los falsos autónomos. El Ministerio pretende que esta situación se prolongue solo por unos meses pero, dada la situación de inestabilidad política, hay un claro riesgo de que la situación se alargue.