El PSOE critica la deslealtad del Gobierno por no consensuar la política económica europea

El PSOE ha recibido con profundo malestar la noticia de que el Gobierno ha renunciado en Bruselas a los eurobonos y a un Tesoro europeo en la próxima reforma del euro. Por el fondo, pero sobre todo por la forma, porque el Ejecutivo no ha consensuado con el PSOE la postura de España en la política económica europea a pesar de estar en minoría y a pesar de que el líder socialista, Pedro Sánchez, le trasladó a Mariano Rajoy en una reunión el pasado diciembre la necesidad de llevar una posición común a Europa. El partido ha registrado la petición de comparecencia en el Congreso del ministro de Economía, Román Escolano, para que explique la propuesta española.

"La propuesta del Gobierno queda en nada, absolutamente vacía", se ha quejado el secretario de Organización socialista, José Luis Ábalos, en comparecencia de prensa en Ferraz. El PSOE considera que el Gobierno restringe las aspiraciones de avanzar en la unión fiscal y financiera y de fortalecimiento institucional de la gobernanza del euro, precisamente lo contrario de lo que aconseja la crisis económica que España aún trata de superar.

Se trata, para el PSOE, de un ejercicio de "absoluta deslealtad" del Ejecutivo de Mariano Rajoy con la oposición, porque lo que se está discutiendo en Europa son cesiones de soberanía de todos los españoles y el Gobierno no puede actuar de forma unilateral. Máxime después de que Pedro Sánchez se lo pidiera personalmente a Rajoy el pasado diciembre. "La respuesta que nos encontramos es esta: una reacción unilateral por parte de un Gobierno en absoluta minoría que no comparte esa posición, la española, con nadie", ha lamentado Ábalos.

Mariano Rajoy pedía hace meses un presupuesto anticrisis del euro, un superministro europeo y eurobonos. Las dos últimas propuestas de España en Bruselas pasaban por modificar el mandato del BCE, crear un seguro de paro y mutualizar deuda. El Gobierno sacrificó este lunes ese nivel de ambición y presentó una propuesta menos afilada. España se conforma por ahora con completar la unión bancaria y crear una capacidad fiscal anticrisis.