Red Eléctrica prepara una ofensiva por Hispasat para no enfriar la operación

REE tiene firmado con Abertis un preacuerdo para comprar el 57% que tiene de Hispasat en febrero del año pasado. La oferta implicaba también al otro socio de Hispasat, la francesa Eutelsat, para desprenderse de su participación del 33,69%, previa venta a Abertis, según compromiso de mayo de 2017. La valoración que Abertis ha hecho de Hispasat se cifra en 1.150 millones de euros, según las cifras que dio la propia empresa con motivo de su junta de accionistas.

El lanzamiento de la opa por parte de la italiana Atlantia en julio trastocó los planes, que todavía entraron en mayor efervescencia cuando Hochtief (filial de ACS) entró en la pelea. Eso supuso que se enfriara la operación; pero los dos grupos compradores confirmaron que estaban dispuestos a vender Hispasat. Este fue, por otra parte, considerado un activo estratégico trascendental por parte del Gobierno, lo que requería, en su opinión, permiso para su venta. REE, con un 20% de capital estatal, tuvo que replegarse a la espera de las decisiones del Ejecutivo. Y eso también ha retrasado la posible adquisición, aunque todo indica a que tendrá que esperar a que la alianza entre ACS y Atlantia concrete la compra de Abertis.

Mientras tanto, el presidente, José Folgado, aseguró en la junta de accionistas celebrada la semana pasada que “el grupo está preparado para ser un gran gestor de infraestructuras y afrontar con éxito los retos y desafíos ligados al papel que jugará en la transición energética”, sin citar en ningún momento a Hispasat. Estos retos son el origen de nuevas oportunidades para crecer. Para el presidente, esos retos son mantener el objetivo de la excelencia en el ámbito de la sostenibilidad en sus tres ejes, social, medioambiental y corporativo; hacer frente a los desafíos de la transición energética y ampliar la base de negocio, tanto en el ámbito internacional como en el de las telecomunicaciones.

Un gran operador

Juan Lasala, consejero delegado, subrayó al respecto que la compañía está preparada técnicamente y mantiene una sólida solvencia financiera para abordar cualquier operación. Pero la que realmente interesa a REE es cerrar la compra de Hispasat y hacer esa diversificación. Aunque en la junta de accionistas se limitó a manifestar que “está valorando la potencial adquisición de una participación en el capital social de Hispasat, con el objetivo de convertir a la compañía en un gestor global de infraestructuras estratégico”, el objetivo es crear un gran operador en telecomunicaciones a través de la gestión de la fibra óptica y los satélites de Hispasat.

REE ha hecho su expansión internacional en Chile y Perú. En Chile destaca la puesta en servicio de la línea Mejillones-Cardones, de 500 kilovoltios y 600 kilómetros de longitud y la adjudicación de un proyecto en el norte del país, para construir una línea de 250 kilómetros, lo que posiciona a Red Eléctrica como uno de los principales agentes en una futura interconexión con Perú. En este país, ha adquirido el 45% del capital de Red Eléctrica del Sur (REDESUR). Una vez finalizados los proyectos en ejecución, Red Eléctrica pasará a gestionar más de 1.300 kilómetros de líneas de transporte en el sur de Perú, donde la compañía se ha consolidado como el principal gestor de redes de transporte.

REE ingresó en 2017 1.941 millones de euros, un 0,5% más que el año anterior; y obtuvo un beneficio de 670 millones de euros, un aumento del 5,2%. La inversión fue de 510 millones, algo menor que la del ejercicio anterior. Esta se ha destinado fundamentalmente al desarrollo de la red de transporte, 411,8 millones. El coste medio de la deuda se ha reducido hasta el 2,78% y se han mejorado las de solvencia, con un EBITDA mejorado de 10,3 y una ratio de fondos de las operaciones/deuda de casi el 25%.