Un niño de dos años muere en EE UU tras volcarse una cajonera de Ikea

Ikea confirmó la semana pasada que otro niño ha fallecido en Estados Unidos aplastado por una cómoda. En un aviso en su página web, destinado a problemas de seguridad o advertencias sobre sus productos, la compañía de muebles sueca señaló que la Comisión de Seguridad en Productos al Consumo de Estados Unidos le informó de que en mayo de 2017 se había producido un accidente doméstico y que fue causado por uno de sus productos, una cajonera Malm. Murió un niño pequeño. "Nuestros corazones están con la familia afectada, y ofrecemos nuestras sinceras condolencias en este momento tan difícil", asegura la empresa, que hace justo un año llamó en Estados Unidos a los propietarios de estas cómodas a devolverlas o anclarlas a la pared.

Según varios medios estadounidenses, el niño que murió se llamaba Jozef, tenía dos años y vivía en California. Estaba durmiendo la siesta en su habitación, se despertó y de algún modo la cómoda Malm de tres cajones se volcó y le aplastó.

Los accidentes con cómodas Malm se han convertido en un problema de seguridad para la compañía. Las autoridades comunicaron varios accidentes graves y al menos cuatro muertes de niños desde 2012, porque se les volcó encima una de estas cajoneras. El pequeño de California es el primero que fallece tras la campaña de retirada y avisos de 2016.

En concreto, la compañía realizó el año pasado un llamamiento masivo para que los clientes que lo desearan devolvieran el producto en Estados Unidos y también para que los propietarios que optaran por anclar a la pared pudieran solicitar de manera gratuita anclajes. Afectaba a cerca de 29 millones de cómodas de tres, cuatro, cinco y seis cajones.

De hecho, Ikea recuerda en el comunicado sobre la última muerte que "la investigación inicial indica que la cómoda involucrada en este incidente no se había anclado correctamente en la pared. IKEA insta a todos los consumidores a sujetar de forma segura las cómodas a la pared", con los anclajes incluidos en la caja de montaje. "La fijación a la pared es una parte imprescindible de las instrucciones de montaje, que no debe pasarse por alto. Si es imposible que los productos se anclen a la pared, los consumidores deben elegir una solución de almacenamiento diferente", advierte.