La plastificadora de maletas de Barajas podrá operar mientras se resuelve su pulso con Aena

Sinapsis Trading, la empresa concesionaria del servicio de plastificado de equipajes del aeropuerto de Barajas, entre otros, podrá seguir ejerciendo esta actividad mientras se resuelve el contencioso que mantiene con Aena a cuenta de los plastificadores ilegales que operan en las instalaciones, perjudicando su negocio. Así lo acordó el juzgado de primera instancia número 69 de Madrid el pasado 19 de julio al desestimar la petición cautelar del gestor aeroportuario de ordenar el cese de la actividad de Sinapsis hasta que se resuelva el conflicto.

El conflicto entre Sinapsis y Aena se deriva de la presencia en Barajas de lo que la empresa califica de “red mafiosa organizada” de más de 150 plastificadores de maletas ilegales. Sostiene Sinapsis que estos operadores piratas les roban 3 millones de euros de negocio al año. Además, han denunciado agresiones de estos “ilegales” a sus trabajadores. Sinapsis, que realiza el mismo servicio en otros ocho aeropuertos españoles, sostiene que Aena no hace nada por desalojar a estos empaquetadores, pese a que tiene esa competencia –Aena dice que no la tiene- y pese a que la empresa se lo viene solicitando desde julio de 2016. Por ello, en mayo de 2017 demandó a los máximos directivos del gestor aeroportuario por incumplimiento de contrato.

A su vez, en marzo de este año, Aena comunicó unilateralmente a Sinapsis la resolución del contrato de concesión del servicio, adjudicado a la empresa en diciembre de 2015, ejecutó el aval de 1,7 millones de euros depositado como fianza por Sinapsis, convocó un nuevo concurso y procedió a demandar a la empresa por haber dejado de pagar el canon establecido en el contrato. En dicha demanda, solicita que el juzgado ratifique la resolución unilateral del contrato, que Sinapsis sea desalojada del aeropuerto y una indemnización por daños y perjuicios por valor de 1,6 millones de euros más una multa de 37.468,5 euros diarios desde el 17 de marzo de 2017 hasta que Sinapsis sea desalojada de Barajas o lo abandone de forma voluntaria. Además, según consta en el auto del juzgado madrileño, exigía a Sinapsis el pago de las facturas atrasadas por 1,4 millones de euros más intereses de demora.

En dicha demanda, como medida cautelar, Aena solicitaba que se ordenase el cese de la actividad de la empresa en el aeródromo madrileño mientras se resolvía la demanda principal. Esta es la petición que deniega el juzgado madrileño. Contra su decisión, emitida el pasado 19 de julio, cabía recurso de apelación en un plazo de 20 días a partir de la fecha de notificación y teniendo en cuenta que agosto es inhábil. Fuentes de Aena han informado de que están preparando el recurso.

Engaño de Aena

Sinapsis Trading, dirigida por el empresario italiano Fabio Talin, obtuvo la concesión del plastificado de maletas en Barajas en diciembre de 2015. Sostiene Talin que Aena les engañó, puesto que les ocultó la presencia de la red mafiosa en Barajas. Según sus cuentas, el negocio en Barajas podría llegar a 50 millones de euros en cinco años, por el embalaje de 1,2 millones de maletas, pero la presencia de los ilegales lo reduce a la mitad, mientras que el canon por la concesión del servicio es fijo (algo más de 20 millones de euros por los cinco años). En esas condiciones, sostiene, no hay negocio, toda vez que ha de pagar a los 55 empleados de Barajas y las máquinas.

Debido a la resolución del contrato por falta de pago el pasado mes de marzo, Aena convocó un nuevo concurso el pasado mes de abril para este servicio de embalaje al que se presentaron las empresas Leaseprint y Excess Baggage. Sinapsis denuncia que esta última comenzó a operar en Barajas antes de que se adjudicase el concurso. El gestor aseguró que esa operación era legal puesto que Aena había arrendado provisionalmente el servicio de plastificación a esta empresa durante seis meses, hasta que se adjudicase el nuevo concurso.