CNA Fagor abrirá tres fábricas en Asia

El grupo fabricante de electrodomésticos CNA Fagor mira a Asia. La compañía, de matriz catalana y propietaria de la tradicional marca vasca, abrirá antes de que acabe el año tres plantas en Asia, África y Oriente Próximo donde elaborará productos de línea blanca. Con esta operación busca diversificar su negocio y penetrar en mercados que considera altamente rentables. De cara a 2022, la empresa espera triplicar el número de empleados de la marca Fagor, hasta llegar a los 700, y facturar unos 400 millones de euros.

Parladé no reveló a cuánto ascenderá la inversión para poner en marcha estas nuevas fábricas pero sí explicó que se abrirán bajo un modelo de sociedad mixta con partnerslocales. CNA Fagor será el participante minoritario lo que permitirá cumplir con las legislaciones árabes, por ejemplo. El presidente del grupo dijo que una de las operaciones está a punto de cerrarse, por lo cual estaría en funcionamiento antes de que acabe el año. El aterrizaje en estos países le permitirá además ensamblar allí otro tipo de productos sin necesidad de pagar aranceles. Fagor, por ejemplo, es líder en el mercado marroquí.

 El grupo tiene presencia comercial en 89 países y más de 2.585 empleados distribuidos en siete fábricas: tres en China, una en Cataluña y tres en el País Vasco. El año pasado, CNA Fagor facturó 318 millones de euros y esperan superar los 400 millones en 2017. Cata Electrodomésticos comenzó en Torelló (Barcelona) en 1947 y fue una de las pioneras en deslocalizar en China en 1997. Posteriormente se hizo con siete marcas como Apelson y Nodor y, en 2014, incorporó la vasca Fagor, después de que ésta quebrara y saliera a concurso de acreedores.

El grupo adquirió las patentes y marcas de Fagor por 42 millones de euros, ahora Edesa Industrial, que actualmente tiene 477 empleados. Unos 140 eran antiguos cooperativistas de la Corporación Mondragón, que cuentan con un régimen especial de pensiones y que fueron absorbidos temporalmente. Francisco Martín Menéndez, director general del grupo, aseguró que los planes con las plantas vascas pasan por una unificación de la producción en la factoría de Garagarza (Guipúzcoa), que solo tiene en funcionamiento el 30% de su capacidad instalada. El grupo ve allí una gran oportunidad de crecimiento si bien el año pasado se anunció el despido de 40 trabajadores.

Edesa Industrial cerró 2016 con una facturación de 126,5 millones, un incremento del 36% en relación al ejercicio del año anterior y espera llegar a 10 millones de Ebitda. Parladé explicó que su meta es que la marca reconquiste su segundo lugar en el mercado de electrodomésticos de España dentro de dos años. Actualmente, Edesa Industrial cuenta con 477 empleados y la empresa estima superar los 700 de cara a 2022, y llegar a los 400 millones de euros de facturación.