El gigante minero Anglo American prescindirá de 85.000 trabajadores
El severo deterioro del mercado de las materias primas fuerza a la compañía a ahorrar efectivo
El grupo minero británico Anglo American anunció ayer medidas drásticas para hacer frente al mayor desplome de los precios de las materias primas y la energía en una década. El plan de reestructuración anunciado por la compañía, la quinta mayor minera del mundo por capitalización bursátil, incluye el despido de 85.000 trabajadores, las dos terceras partes de la plantilla. Además, la empresa suspende el reparto de dividendos durante los próximo 18 meses y anuncia que venderá la mitad de sus activos.
Minerales y petróleo profundizan su caída
Hierro. El mineral de hierro, del que China compra más de la mitad de la producción mundial, baja un 43% en el último año.
Aluminio. Se deja casi la cuarta parte de su valor desde diciembre de 2015.
Platino. Su desplome, del 31% en las últimas 52 semanas, golpea a Sudáfrica, el mayor productor mundial.
Níquel. Este metal, producido fundamentalmente en Rusia, Canadá y Cuba, es la materia prima que más cae en el último
Zinc. Se deja un 31% de su valor en el último año. China y, en menor medida, Perú y Australia, son los países que más golpeados por su retroceso.
Petróleo. El rey de las materias primas baja un 39% en el último año. Ayer llegó a bajar de los 40 dólares, algo inédito desde principios de 2009.
Las grandes mineras están recortando sus costes para protegerse financieramente ante la caída continuada de los precios de los metales. Anglo American, como la mayoría de las grandes del sector, invirtió miles de millones en nuevos proyectos mientras el rápido crecimiento de la economía China se tragaba toda la oferta de minerales y energía. Al cambiar el ciclo, la desaceleración del crecimiento de la segunda economía mundial ha producido un exceso de oferta que puede tardar años en colocarse y una bajada de los precios que ha dañado gravemente a las firmas productoras.
Los metales y minerales cotizan a niveles no vistos desde los años de la crisis financiera. En paralelo al desplome del precio del petróleo, ayer la tonelada de mineral de hierro cayó hasta los 39,60 dólares, su nivel más bajo en 10 años, después de haber alcanzado un pico de 200 dólares en 2011. “La severidad del deterioro en el precio de las materias primas requiere acciones más audaces”, explicó Mark Cutifani, consejero delegado de Anglo American. “En este contexto, creemos que hacemos lo correcto para asegurarnos de que la compañía continúa en buena forma”.
Las acciones del gigante minero cayeron ayer un 12% y alcanzaron su mínimo histórico desde que la firma empezó a cotizar en la Bolsa de Londres en 1999. Su caída arrastró a otras mineras cotizadas en Reino Unido, colocando al sector en su mínimo en 10 años. En lo que va de año, las acciones de Anglo American han perdido un 70% de su valor, dibujando una curva prácticamente paralela a la de la caída del hierro.
Cierre de 35 minas
En una presentación a los accionistas, la compañía anunció ayer que venderá o cerrará hasta 35 minas. El objetivo es acabar 2017 con solo 20 yacimientos y 50.000 empleados, frente a los 135.000 que tiene en la actualidad. Anglo American reducirá a la mitad sus unidades de negocio: de las seis que tiene en la actualidad, se quedará solo con tres —la rama de diamantes, concentrada en su filial sudafricana de De Beers; el platino y los metales comunes, agrupados en Industrial Metals; el carbón y el hierro, en Bulk Commodities—. Un portavoz de la compañía aclaró que los recortes de plantilla no significan que todos esos empleos se vayan a destruir: “Tengan en cuenta que esto incluye activos que vamos a vender, de modo que los 85.000 trabajos no desaparecen todos, ya que muchos serán empleados por los nuevos propietarios de las minas”. La firma detallará los pormenores de esta reestructuración sin precedentes en febrero del próximo año, cuando presente sus resultados anuales.
El de Anglo American es el mayor plan de reestructuración de una gran minera en respuesta al desplome de las materias primas. La firma británica no es la única de las gigantes mineras que se ha embarcado en procesos de este tipo, pero su dependencia del mineral de hierro la ha convertido en especialmente vulnerable.
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