Rosell propone continuar con la moderación salarial
Las posiciones de sindicatos y empresarrios se alejan
El presidente de la CEOE, Juan Rosell, quiere que se mantenga la política de moderación salarial, congelación en la práctica, que los sindicatos y la patronal han mantenido en el último trienio. “Lo que podemos firmar aguas arriba es lo que se negocia y se firma en los convenios, y esos están en el 0,6%”, ha expuesto Rosell. “Creo que van por ahí los tiros”, añadió, según Servimedia. La propuesta de la patronal, que ha llegado en un acto matinal, ha encontrado pronta respuesta sindical por la tarde. "Es claramente insuficiente", ha lamentado Cándido Méndez, secretario general de UGT.
El pacto de rentas trienal que en 2012 firmaron sindicatos y empresarios contemplaba para este año una recomendación de subida del 0,6%, que es el porcentaje de aumento que se está suscribiendo en los convenios firmados este año. Pero este umbral se aleja de las demandas de UGT y CC OO, que llevan meses advirtiendo de que los sueldos, tras años de devaluación, tienen que empezar a subir.
La patronal y las centrales de trabajadores mayoritarias están negociando durante estas semanas un nuevo pacto. Y aunque las conversaciones avanzan en varios puntos como la flexibilidad interna en las empresas o la estructura de la negociación colectiva, las posiciones todavía están alejadas en lo referente a los salarios, según se deduce de una circular conjunta que los dos sindicatos han difundido en sus organizaciones.
En el documento, ambas centrales propugnan una vuelta al modelo de fijación de salarios anterior al pacto vigente, algo que choca con medidas como las impulsadas por el Gobierno, como la ley de desindexación o la última reforma de pensiones. Aquel consistía en un aumento a comienzos de año según la inflación prevista, un incremento adicional por productividad y una cláusula que garantice el poder adquisitivo si la subida de precios durante el año es superior. Por su parte, la patronal quiere establecer un mecanismo por el que los sueldos subirían en función de la evolución del PIB o de la afiliación a la Seguridad Social, al que se añadiría una cláusula de revisión que solo entraría en vigor si se supera los precios suben más del 2%, el objetivo de inflación del BCE, algo que los sindicatos rechazan de plano, según la citada circular. Pero la distancia entre ambas posiciones no es el único obstáculo que se opone. La CEOE está inmersa en un proceso electoral que, según apuntan fuentes de la patronal, condiciona mucho “la libertad” para negociar de la organización.
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