Carlyle recibe 178 millones de Telecable después de comprarla

El fondo de capital riesgo Carlyle Group ha recuperado el 52% de los fondos que invirtió en Telecable apenas un año después de comprar la operadora de cable, merced al reparto de un dividendo extraordinario de 178 millones de euros, aprobado por el consejo de la cablera en enero de 2013, cuando ya estaba bajo control del fondo, según figura en las cuentas anuales de la operadora asturiana remitidas al Registro Mercantil.

En diciembre de 2011, Carlyle formalizó la compra del 85% de Telecable y pagó 340 millones a Liberbank (la antigua Cajastur más otras cajas que era socio mayoritario en Telecable) y Prensa Ibérica (editor de La Nueva España, que poseía el 8%). A consecuencia de la operación, Liberbank ingresó 308 millones y mantuvo el 15% del capital.

En enero de 2013, ya bajo la tutela de Carlyle (que controla el 85%) y Liberbank (15%) aprobaron el reparto de un dividendo extraordinario de 209 millones de euros con cargo a unas reservas de fusión generadas por la integración de dos sociedades de la operadora para crear la Telecable actual. El fondo, a través de la sociedad Telecable Capital Holding (de la que es único accionista), ingresó 178 millones y los restantes 31 millones fueron para la entidad financiera.

La sociedad pagó el dividendo extra pese a estar en pérdidas

Para pagar el dividendo, Telecable pidió un crédito sindicado de en torno a los 200 millones de euros. Como consecuencia de ello, el nivel de endeudamiento con entidades de crédito se multiplicó casi por diez, pasando de 23 millones al cierre de 2012 a 220 millones de euros en 2013, de los que 208 millones son a largo plazo. Los gastos financieros por el pago de intereses pasaron de 4,7 a 17,6 millones de euros. El patrimonio neto ha disminuido un 67%, de 320 en 2012 a 105 millones en 2013.Deloitte, en su informe de auditoría de las cuentas, "llama la atención" respecto al dividendo pagado y su efecto sobre la estructura financiera de la empresa, aunque no lo considera una salvedad.

En ese ejercicio de 2013, en el que se produjo el reparto del dividendo, la operadora de telecomunicaciones registró unas pérdidas netas de 5,7 millones de euros frente a unos resultados negativos de 1,13 millones del año anterior. La cifra de negocio creció un 3,7% hasta los 133,3 euros millones, mientras que el resultado de explotación aumentó un 2% hasta los 7 millones de euros.

En la puja por Telecable, Carlyle le ganó la partida a Ono y a la gallega R (controlada por CVC). Pese a que ambos pretendientes eran operadores de cable, triunfo la oferta del fondo norteamericano porque era la que aportaba mayor liquidez y Liberbank necesita esos fondos para completar su reca'pitalizacióin sin recurrir a fondos estatales.

El consejero delegado de Telecable, Alejandro Martínez, en declaraciones a este diario, indicó que "dicho dividendo pagado por Telecable de Asturias en 2013 no supone un dividendo como tal, sino simplemente un pago intragrupo a Telecable Capital Holding, no produciéndose una salida de dicha tesorería si lo enmarcamos al Grupo Consolidado". Tanto la memoria como el auditor reflejan ese pago como "dividendo" y detallan que Telecable Capital Holding es 100% propiedad del fondo Carlyle.

Telecable contaba con 121.694 clientes de banda ancha fija a cierre de 2013, con un 1% de crecimiento en el último año , según las últimas cifras facilitadas por la CNMC. La operadora asturiana, junto a la gallega R y a la vasca Euskaltel, son las tres cableras que aún se mantienen al margen de los tres grandes operadores (Movistar, Vodafone y Orange), tras la compra de Ono.

Carlyle es uno de los mayores fondos de capital riesgo del mundo. En España, ha participado en operaciones como Applus+, el grupo turístico Orizonia, y la empresa de servicios informáticos Arsys.