ING devolverá todo el dinero de su rescate en este año

Los rescates de bancos con dinero público no siempre acaban mal para el contribuyente. Incluso pueden convertirse en un negocio muy rentable. Al menos, en Holanda. ING ha anunciado que antes de que acabe el año completará la devolución de todos los fondos que le inyectó el Estado holandés cuando tuvo que salir a su rescate en octubre de 2008.

La entidad, que opera también en España, no solo devolverá los 10.000 millones que le prestó el Estado, sino que lo hará con elevados intereses, del 12,5%. De hecho, el banco naranja ya ha ingresado en las arcas públicas hasta el momento 9.300 millones de euros correspondientes a la inyección de capital y otros 3.200 millones de euros en intereses.

Ahora le restan otros 2.000 millones a los que hay que sumar otros 1.400 millones por la revalorización de la cartera de hipotecas norteamericanas que la entidad sacó del balance, y que fue el origen de sus problemas financieros en 2008. Es decir, que el Fisco holandés y, por ende, el contribuyente va a ganar 6.000 millones de euros con el rescate del banco del león naranja.

La decisión fue anunciada tras superar con holgura a entidad holandesa el test de solvencia a la banca realizadas este domingo por la Autoridad Bancaria Europea (EBA) en coordinación con el Banco Central Europeo (BCE). La entidad incluso se plantea volver a pagar dividendo a sus accionistas en el primer semestre de 2015, tras siete años en el que no ha habido ningún reparto.

Una situación muy diferente del rescate de la banca española. Hasta el momento y solo en inyecciones directas de capital, ha recibido más de 61.500 millones de euros fundamentalmente a cuatro entidades (Bankia, 22.424 millones; Catalunya Banc, 12.055 millones; Novagalicia, 9.055 millones y Banco de Valencia, 5.500 millones).

De esa cantidad, el Estado solo ha recuperado 1.760 millones procedentes de la venta de Novagalicia y las devoluciones que hizo CaixaBank a cuenta de Banca Cívica. Otros 1.135 millones por la amortizaciones de obligaciones convertibles de Ibercaja, Unicaja y Liberbank. Y los 1.300 millones restantes por la venta del 7,5% de Bankia, aunque estos siguen en el balance de su matriz, BFA. Es decir que, en total, solo han sido devueltos unos 4.000 millones. Con el agravante de que 26.000 millones de las ayudas ya está irremisiblemente perdido de las entidades que ya han sido reflotadas y posteriormente vendidas por un precio mucho menor (Catalunya Banc, Banco de Valencia, Banco Gallego y NCG Banco).

El rescate de ING en 2008 se produjo ante los fuertes problemas que le ocasionó la depreciación de sus activos respaldados por hipotecas basura de Estados Unidos, durante la crisis financiera. Tras el rescate, la entidad cambió su estrategia de negocio y se centró en la banca tradicional huyendo de los productos más arriesgados.

La crisis también pasó factura a la filial española. A finales de octubre de 2008, coincidiendo con el rescate, la entidad sufrió una caída depósitos, como se puso de manifiesto en los resultados del cuarto trimestre de aquel ejercicio, aunque ING España negara la fuga de clientes. Sin embargo, tardó poco en recuperarse. De los 1,8 millones de clientes que contaba entonces ha pasado a tres millones actuales, y los fondos gestionados se han mas que duplicado hasta alcanzar casi los 40.000 millones de euros.