Competencia investiga los anuncios de las eléctricas sobre la tarifa de la luz

Las autoridades de Competencia creen que las eléctricas pueden estar aprovechando el río revuelto de la reforma energética para realizar comunicaciones que pueden resultar equívocas sobre las tarifas de la luz y pescar así mayores ganancias. La Comisión Nacional de Mercados y Competencia (CNMC) ha anunciado la apertura de una investigación sobre los anuncios en prensa y otras comunicaciones de las empresas, como cartas a sus clientes, y si se ha vulnerado la ley y, en su caso, abrir un expediente.

Competencia teme que las eléctricas aprovechen el cambio del método con el que se calcula la factura de la luz (por horas o por periodos de facturación) para meter miedo al consumidor sobre el riesgo de la nueva tarifa y reconducirle a ofertas en el mercado libre que sean más beneficiosas para las compañías. Con la nueva tarifa regulada, el precio voluntario para el pequeño consumidor (PVPC), “no se podrá saber de antemano lo que pagará por la energía”, decía Endesa en un anuncio reciente. Por su parte, Gas Natural Fenosa ha enviado comunicaciones a clientes del mercado libre en las que se les advierte de que se les traspasará a partir del 1 de julio a una tarifa propia a menos que manifiesten que quieren seguir con la referencia del precio regulado. Son este tipo de comunicaciones las que han hecho saltar las alarmas y por las que la CNMC ha pedido explicaciones a ambas compañías..

La CNMC señala en un comunicado que ha tenido conocimiento, a través de diversas informaciones publicadas en prensa, de las comunicaciones escritas a consumidores y de anuncios públicos en medios de comunicación en relación con las opciones de suministro del consumidor doméstico, que “podrían ser equívocos, con el fin de inducir a los consumidores a adoptar decisiones poco meditadas”, señala la CNMC.

Confusión por el nuevo sistema

Se van a investigar comunicaciones y anuncios dirigidos a consumidores a los que antes se les aplicaba la tarifa de último recurso y actualmente se les aplicaría el precio voluntario para el pequeño consumidor (PVPC). De acuerdo con la información recabada por la CNMC, estas comunicaciones aparentemente engañosas se habrían producido coincidiendo con el reciente cambio regulatorio para el cálculo del PVPC y su régimen de contratación.

Con el nuevo método, se factura parte de energía del recibo de la luz en función de cuál haya sido el precio de mercado mayorista hora por hora (si los contadores digitales lo permitan) o en el periodo de facturación, a menos que los consumidores se acojan a las ofertas del mercado libre o a la tarifa estable anual. Sin embargo, las ofertas sobre esa tarifa estable han sido tan altas y con sobrecostes tan importantes que resultan disuasorias para el consumidor. Así, si los consumidores se asustan con la tarifa más volátil y ven muy cara la estable, pueden aceptar las ofertas del mercado libre, las diseñadas por las propias eléctricas y que en ocasiones conllevan gastos por servicios adicionales.