Iveco remonta el vuelo
La apuesta de CNH Industrial por el fabricante de camiones empieza a dar sus frutos.
En 1990, tras un periodo de negociaciones con holandeses, alemanes e italianos, el Gobierno español decide finalmente dejar en manos de estos últimos las riendas del caballo alado de Pegaso, del que era propietario el Instituto Nacional de Industria a través de Enasa. Superada la crisis de aquellos años, durante dos décadas Iveco, resultado también de la fusión de cinco compañías italianas, francesas y alemanas en 1975, ha ido salvando los muebles del primer fabricante de vehículos industriales en España y el único de camiones. Por el camino quedó a mediados de 2011 la planta de autobuses —Irisbus— de Barcelona.
La situación económica creada a partir de 2008 había traído de nuevo los fantasmas de un abandono de sus actividades en España, o cuando menos una reducción importante. Sin embargo, en 2012, CNH Industrial, nombre del grupo en el que se encuentra ahora enmarcado Iveco, decide apostar claramente por su presencia en España y anuncia unas inversiones de 500 millones de euros y la creación de 1.200 puestos de trabajo, de los que ya se han contratado 740 en su planta de Madrid, que tiene una capacidad máxima de 36.000 camiones anuales y donde se fabrica en la actualidad a un ritmo de unas 25.000 unidades. La mayor parte de los vehículos se destinan a la exportación, y es que de los 35.700 camiones que llegaron a venderse en el mercado español en 2007, se pasó a 10.500 en 2012 (8.234 en 2009).
La mayor parte de los vehículos se destinan a la exportación
Pero ni una cifra ni otra parecen ajustadas a la normalidad económica, que, según el presidente de Iveco España, debería situarse entre 20.000 y 22.000 unidades. Y a la que parece que han empezado a acercase a juzgar por el incremento de las ventas en enero —50% en tasa interanual—, en febrero —30%— y las también importantes de marzo —55%— . Si tenemos en cuenta el mercado español de vehículos de más de tres toneladas y media, en el primer trimestre del año se vendieron 7.255 unidades, un 42,9% más que en el mismo periodo de 2013. Y de ellas, 1.578 corresponden a las matriculaciones de Iveco, lo que supone un incremento del 62,8% y una cuota del 21,8%.
“Las previsiones son buenas para este año y podemos registrar crecimientos del 13% o 14% en el mercado de vehículos de más de 3,5 toneladas y del 9% o 10% en los camiones pesados”, señala Jaime Revilla, presidente de Iveco España, avisando inmediatamente de la incertidumbre que plantean las condiciones financieras actuales. “Es cierto que los clientes tienen más trabajo, pero el crédito sigue siendo un problema importante”. En este sentido, trabajan desde la patronal ANFAC para conseguir una mayor liquidez, “pero la clave no es solamente que haya un mayor acceso, sino el hecho de tratarse de un sector catalogado por la banca como de alto riesgo, y las financieras de marca hacemos lo que podemos dentro de nuestras limitaciones”. Incluso adelanta su carta a los Reyes Magos para pedirles “la definición de un perfil financiero del cliente y ver quién pasa y quién no, y a partir de ahí, repartir al 50% los riesgos entre las Administraciones y la financiera de marca”.
Para el presidente de Iveco, “el PIMA Aire ha desempeñado un papel importante en este inicio de la recuperación de las ventas, pero en el próximo plan de ayudas a la compra de camiones debería tenerse en cuenta este reparto de riesgos”.
Buenas perspectivas de cualquier manera, respaldadas por un plan industrial que abarca hasta 2016 y que ha sido posible por varias razones. Además de contar con unas infraestructuras de producción ya en funcionamiento, “porque España no es ni pretende ser un país low cost, y tenemos la mano de obra más competitiva y cualificada de los países desarrollados de nuestro entorno”. Sin olvidar una red de proveedores desarrollada durante años, con multinacionales muy importantes que trabajan para todas las marcas y tienen fábricas en todo el mundo. “No tenemos multinacionales españolas de automoción, pero sí de componentes”. Y contando con la colaboración de los sindicatos, “a los que hay que reconocer lo que se merecen porque se adelantaron a sus colegas europeos con acuerdos de flexibilidad que han sido fundamentales para crear empleo y asegurar el futuro, algo que era inimaginable en otros países”.
En 2012 se anunció una inversión de 500 millones de euros en España
La de Madrid es la única fábrica del grupo en Europa que produce camiones pesados y de la que sale la nueva gama del Stralis Hi-Way, camión del año en 2013, a la que se unirán el resto de las versiones adaptadas a la normativa Euro 6, tanto de obras como de carreteras, adaptados… Por su parte, en la planta de Valladolid se fabrica la furgoneta Daily para toda Europa al encontrarse en paro técnico la planta de Suzzara (Italia) para prepararse al lanzamiento de la nueva generación. “En la vida no hay nada seguro, porque el futuro lo escribimos cada día, pero la posición de Iveco en España es sólida”, afirma rotundo Revilla, que espera seguir creciendo “de forma consolidada, un paso tras otro, sin cosas espectaculares, pero sólidas”.
Un futuro respaldado por una organización fruto de la fusión entre Fiat Industrial y la norteamericana CNH Global, uno de los mayores fabricantes de maquinaria agrícola y de construcción. Con una presencia mundial, CNH Industrial alcanzó una facturación de 25.800 millones en 2013, con un resultado de explotación de 2.000 millones y un beneficio de 917 millones. Está sometida a la legislación holandesa para poder mantener el control de la misma sin alcanzar el 51% del capital y tiene la sede fiscal en Reino Unido para ofrecer una remuneración a sus accionistas con menores presiones fiscales, aunque, según Jaime Revilla, el lugar de la sede no es lo importante, sino el tratarse de “un grupo con una dimensión financiera adecuada para poder asumir las inversiones que necesitamos, una verdadera compañía global que trata de alcanzar todas las ventajas posibles para mejorar su competitividad”.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.