Telefónica admite que negocia con el grupo PPF la venta de su filial checa

Telefónica ha admitido este martes que está negociando con el grupo inversor PPF del multimillonario checo Petr Kellner el futuro de su participación del 69,4% en su filial checa Telefónica Czech Republic valorada en 2.650 millones de euros, según un hecho relevante notificado esta mañana a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV)

“Telefónica comunica que está explorando alternativas estratégicas en relación a su participación en el capital de Telefónica Czech Republic, incluyendo conversaciones con el grupo inversor PPF, no existiendo certeza respecto a que se vaya a alcanzar un acuerdo, ni en cuanto a sus eventuales términos y condiciones”, señala el comunicado.

La compañía confirma así la noticia divulgada este lunes desde Praga por las agencias de noticias Reuters y Bloomberg, que se hicieron eco de la subida del 6,9% de las acciones de la filial de Telefónica en la Bolsa checa.

Aunque Telefónica prefiere hablar de “alternativas estratégicas en relación a su participación” en lugar de la venta, la operación le serviría para cumplir su objetivo de reducir su deuda por debajo de los 47.000 millones de euros al final del año. La operadora española negocia con PPF, propiedad del hombre más rico del país, Petr Kellner, que vendió recientemente su división de telecomunicaciones, pero parece dispuesto a volver al sector.

En este sentido, PPF consideró la posibilidad de unirse a la subasta de espectro 4G celebrada en la República Checa como un nuevo competidor, pero finalmente no lo hizo, por lo que la compra del negocio de Telefónica sería una alternativa. Si las negociaciones con PPF no fructifican hay otros candidatos como un fondo de capital riesgo y dos grupos rusos de telecomunicaciones, según informa Reuters.

Entrada en Cesky en 2005

Telefónica compró esta participación en 2005 dentro del proceso de privatización puesto en marcha por el Gobierno checo de Cesky Telecom, el antiguo monopolio. El grupo que preside César Alierta realizó la operación en dos fases. En la primera tomó el 51,5% de la operadora por 2.746 millones. En una segunda fase lanzó una oferta pública de adquisición en la que tomó otro 18,3% por 917 millones de euros, por lo que el desembolso total ascendió a 3.663 millones de euros. Con la valoración de la filial en la apertura de la sesión del lunes, antes de que se conociera la noticia, esa participación valdría 2.650 millones de euros.

La venta de la filial checa, en caso de concretarse, se sumaría a una serie de desinversiones como la venta de su negocio en Irlanda a Three, filial irlandesa de Hutchison Whampoa, por 850 millones de euros; la venta del negocio de banda ancha fija en Reino Unido y los 440 millones de euros (incluyendo el variable) de la transmisión del 40% del negocio de Telefónica Centroamérica.

Competidores

Telefónica, bajo la marca O2, compite en la República Checa contra la filial de Deutsche Telekom, T-Mobile, y Vodafone, así como con otros operadores móviles virtuales. El número total de clientes de la compañía en la región, incluyendo Eslovaquia, se situó en 9,3 millones, de los que 5,1 millones son de móviles.

De acuerdo con los últimos datos publicados por la operador, los ingresos de Telefónica en la República Checa y Eslovaquia fueron de 930 millones de euros en el primer semestre del año, lo que supone un descenso del 7% interanual. Además, el resultado bruto antes de amortizaciones (Oibda) de la firma ascendió a 356 millones de euros a junio de 2013, lo que supone una caída del 12,2% respecto al mismo periodo del año anterior.