El mercado espera que Portugal vuelva a emitir hoy deuda a largo plazo
Los analistas y los medios lusos esperan que Portugal vuelva hoy a los mercados de deuda a medio y largo plazo con una emisión de bonos a cinco años de al menos dos mil millones de euros, la primera desde que pidió el rescate financiero.
El Gobierno conservador luso sólo ha expresado su voluntad de volver a emitir obligaciones en un plazo breve y no ha confirmado si lo hará hoy, 24 horas después de que España lograra colocar 7.000 millones de euros en bonos a diez años con una demanda récord y el 5,4 % de interés.
Pero en el mundo financiero y en la prensa económica de Lisboa hay unanimidad en que la vuelta de Portugal al mercado es hoy, e incluso el partido de Gobierno y los de la oposición de izquierda se adelantaron ya en ensalzar y criticar, respectivamente, el paso que se atribuye al Ejecutivo.
La decisión de anticipar el regreso a las emisiones a medio y largo plazo -que podía retrasarse hasta finales de este año- se ve facilitada por el anuncio, el martes, de que Portugal cumplió en 2012 la meta de déficit fiscal y espera además que la UE y el FMI alarguen los plazos de vencimiento de los fondos del rescate.
Aunque puede depender de la demanda, los expertos apuestan por una emisión de al menos dos mil millones de euros y tipos de interés inferiores al 5 %.
El entorno de esa esperada colocación se ve favorecido también porque la deuda soberana lusa a diez años cotizó el martes por primera vez desde finales de 2010 por debajo del 6 % de interés, tres veces menos que hace un año, cuando la presión de los mercados sobre el país alcanzó su cota máxima.
Sin embargo, la agencia de calificación Standard & Poor's volvió a arrojar un jarro de agua fría sobre el país al anunciar el martes que mantiene su nota en "bono basura" y con perspectiva negativa por el riesgo de que el Tribunal Constitucional rechace varios ajustes presupuestarios claves para reducir el déficit.
Desde que pidió el rescate financiero a la Unión Europea y el Fondo Monetario Internacional (FMI) en abril de 2011, las agencias de notación financiera se cebaron en sus calificaciones de solvencia y Portugal sólo ha emitido deuda a corto plazo, de tres a 18 meses.
Pese a los 78.000 millones de euros que obtuvo para atender sus necesidades financiares entre 2011 y 2013, los intereses de la deuda continuaron subiendo hasta hace sólo doce meses y llegaron al 17 %.
Ahora, la relajación de la presión de los mercados sobre la deuda lusa viene acompañada de la buena noticia avanzada el martes por el Gobierno sobre el cumplimiento de su objetivo de déficit fiscal, que en 2012 quedó por debajo del 5 % del PIB, según datos preliminares.
El ministro de Finanzas portugués, Vítor Gaspar, aseguró que el límite marcado por Bruselas equivalía a unos 9.000 millones de euros y el país cerró el pasado año con un déficit público de unos 8.300 millones.
Debido a la fuerte caída de los ingresos fiscales del Estado luso, la UE y el FMI aceptaron en septiembre suavizar las exigencias a Portugal y dejar su meta de déficit para este año no el 4,5 % original sino en el 5 %.
Ahora, tras cumplir a rajatabla las exigencias de la UE y el FMI y aplicar las más duras medidas de austeridad que se recuerdan en Portugal, el Ejectivo de Pedro Passos Coelho, confía en que sus prestamistas le den mayores plazos para devolver los dineros del rescate.
Gaspar aseguró que hay "expectativas fundadas" de que Lisboa recibirá el apoyo de sus socios europeos para poder diluir la "concentración de pagos muy importante" que tiene en 2014, 2015 y 2016.
Portugal, agobiado por el peso de sus deuda, sufre, además, la peor crisis económica en más de tres décadas de democracia con una caída del PIB que en los últimos tres años suma casi el 6 % y un desempleo superior al 16 %.
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