El grupo Wahaha ofrece vías de comercialización a los productos españoles en China
"¿Cuánta leche producís?", "¿fabricáis leche en polvo?", ha preguntado insistentemente a las tres empresas lácteas -Grupo Leche Pascual, Central Lechera Asturiana y Covap- que en apenas tres minutos han tenido que mostrar sus posibilidades ante Zong, fundador y propietario de Wahaha, una de las principales distribuidoras de su país.
Las cifras le avalan: China importó el pasado año 20.000 toneladas de leche -principalmente de Nueva Zelanda- y la demanda va en aumento; según Zong, este año podrían llegar a importar hasta 70.000 toneladas.
La directora general de Gran Consumo de Central Lechera Asturiana, María García Fernández, ha achacado el patente interés de Zong por la leche española a "los problemas de seguridad alimentaria que han afectado al país este año, especialmente en la leche en polvo, que es la que más se consume allí".
Con la seguridad alimentaria y la calidad como estandarte, desde La Asturiana esperan que este acuerdo "cuaje" y "fructifique", y puedan así implantarse en China, un mercado en el que todavía no tienen presencia.
El que sí tiene un lugar en el mercado chino es Grupo Leche Pascual, con yogures de larga vida y productos de soja, aunque, según ha afirmado a los medios de comunicación su director de exportación, Javier Pujalras, "si el señor Zong quiere leche líquida, no hay problema".
"Nuestra leche uperisada tiene entre siete y nueve meses de vida, y el producto tarda en llegar a China unos veinte días, así que hay garantía suficiente para venderla allí", ha explicado.
En el caso de la cooperativa ganadera Covap, su director de i+D+I y calidad, José Antonio Rísquez, ha recordado que la empresa está en la última fase de homologación para vender en China, donde quiere entrar con sus dos líneas de producto: leche y cárnicos.
"Hay varios distribuidores chinos interesados en llevar leche al país; no sólo leche en polvo, sino también leche UHT", ha indicado.
Aspira a entrar en China con cárnicos de alta gama -jamones, paletas y embutidos ibéricos-, y aprovechar su experiencia exportadora en 28 países, entre ellos Estados Unidos y Canadá, "que tienen dos de las legislaciones más estrictas en cuanto a cárnico", ha remarcado.
Pero aunque el lácteo haya sido el protagonista "sorpresa" del encuentro, Zong también ha fijado su interés en dos de los productos estrella de la agroindustria española: el aceite y el vino, y ha recibido a 13 empresas de ambos sectores.
El presidente de la cooperativa vinícola Baco, Ángel Villafraca, ha detallado que, además de por el vino, ha mostrado interés por los zumos de uva, producto con el que la compañía podría incrementar su presencia en China, donde ya comercializa algunos de sus caldos.
"Estamos esperanzados; nuestra experiencia en el mercado chino nos dice que aunque los negocios avanzan lentamente, una vez que se da el paso el éxito está garantizado por los volúmenes de venta que se generan", ha asegurado.
Más cauto ha sido el ejecutivo de la unidad de vinos de Anecoop, Vicent Montesinos, quien ha admitido que, como la competencia de los vinos franceses en la distribución es todavía muy fuerte, van a intentar abrirse hueco con los cítricos, aunque sólo durante el mes en el que el mercado no se copa con el género de EEUU y Australia.
"De esta reunión no saldrá nada sólido; es sólo una oportunidad para iniciar contactos con Wahaha", ha subrayado.
Hojiblanca, sin embargo, lleva ya meses "de conversaciones muy avanzadas" con Wahaha -según ha señalado su director general, Antonio Luque-, por lo que confían en comenzar a vender pronto a través de su red de distribución por toda China, donde tienen presencia desde el año 2000.
Sara Gómez Armas
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