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Caja Madrid rebaja a la mitad su dotación a la obra social

El presupuesto se mantendrá gracias a los remanentes de años anteriores. -El recorte es consecuencia de una caída del beneficio del 50%

El consejo de Caja Madrid ha propuesto a la asamblea de la entidad destinar a Obra Social 40,6 millones de euros con cargo a los resultados de 2010, según la documentación puesta a disposición de los consejeros generales. Esa cifra es prácticamente la mitad de los 80 millones dotados con cargo a los resultados de 2009. Sin embargo, fuentes de la caja de ahorros han explicado que el presupuesto para las actividades de Obra Social de Caja Madrid se mantendrá en el entorno de los 130 millones de euros gracias a los fondos disponibles de ejercicios anteriores.

Esa propuesta se votará como punto cuarto del orden del día de la Asamblea que se celebrará el próximo 8 de marzo, según la citada documentación. El descenso de la partida destinada a obra social es consecuencia directa de la caída de los beneficios de la entidad. Según las cuentas anuales que ha puesto a disposición de los consejeros generales, el beneficio de Caja Madrid cayó un 50%, hasta 180,5 millones de euros.

Caja Madrid publicó hace unas semanas unos resultados según los cuales el beneficio había caído un 3,7% hasta 256 millones. Sin embargo, no se trataba de los resultados reales, sino de unos datos proforma del grupo Caja Madrid antes de saneamientos extraordinarios, tal y como se indicó entonces. En realidad, al integrarse en el sistema institucional de protección (SIP) cuyo vehículo es Banco Financiero y de Ahorros, Caja Madrid ha dejado de formular cuentas consolidadas (las formula el nuevo grupo) y ha pasado a publicar solo cuentas individuales. Es en estas cuentas individuales, las únicas reales de la caja a partir de ahora, en las que el beneficio neto ha caído un 50%, según los datos puestos a disposición de los consejeros generales de la entidad.

Esas cuentas muestran una fuerte caída del patrimonio neto de Caja Madrid (desde 9.722 hasta 5.712 millones de euros) como consecuencia de los ajustes y saneamientos derivados del proceso de integración.

La asamblea, además, votará la segregación de activos y pasivos afectos al negocio bancario. La caja conservará la marca Caja Madrid, los activos y pasivos de la obra social, el monte de piedad, algunas participaciones y los bienes muebles e inmuebles de interés cultural.

La documentación puesta a disposición de la caja muestra también que no se han satisfecho prestaciones por pensiones para los directivos que salieron de Caja Madrid en 2009, tras la decisión del consejo presidido por Rodrigo Rato de no reconocer el bonus de 25 millones destinado a Miguel Blesa, el anterior presidente, y otros nueve directivos de la entidad.

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