Nissan adjudica la nueva furgoneta a Barcelona
La decisión de la multinacional japonesa garantiza la viabilidad de la planta para los próximos 10 años.- La Generalitat elogia la responsabilidad de los sindicatos
Las plantas de Nissan en Zona Franca de Barcelona y Montcada serán la encargadas de fabricar el nuevo modelo de furgoneta pick up que piensa distribuir la multinacional en todo el mercado europeo. La decisión de la matriz japonesa responde al esfuerzo de los trabajadores, que la semana pasada decidieron aceptar otro ajuste en sus condiciones laborales después de que en diciembre la matriz les descartara para nuevos proyectos por sus altos costes de producción. La decisión permite garantizar los puestos de trabajo otros 10 años y las plantas de Zona Franca y Montcada reciben una inversión de más de 80 millones de euros. Barcelona ha ganado la batalla a Sudáfrica y Marruecos.
La directiva de las plantas catalanas ha enviado una nota mostrando su satisfacción por la decisión y por la decisión que tomaron los empleados al ajustar sus condiciones de trabajo. "La Planta de Barcelona recibe con satisfacción la decisión tomada hoy puesto que garantizará el futuro sostenible de la fábrica, sus empleados y sus familias. Nissan aplaude el compromiso y apoyo del equipo directivo local, de los empleados, de los sindicatos SIGEN-USOC y MCA-UGT y de los Gobiernos. Así mismo, espera trabajar con todos ellos para asegurar que la Planta de Barcelona sea y se mantenga globalmente competitiva", declara en un escueto comunicado.
El consejero de Empresa y Ocupación de la Generalitat, Francesc Xavier Mena, ha elogiado hoy la responsabilidad de los sindicatos. Mena ha puesto lo que ha pasado en Nissan "como ejemplo" de "por dónde ha de ir el futuro de la economía para ser más competitiva". El ministro de Industria, Turismo y Comercio, Miguel Sebastián, ha calificado como "muy buena noticia" el anuncio "en estos momentos que no son fáciles", al tiempo que ha elogiado la "gran generosidad y gran responsabilidad" de la plantilla. La sensación entre los trabajadores, sin embargo, es agridulce. Uno de los trabajadores comentaba que "es una satisfacción tener trabajo pero hay que tener en cuenta el sacrificio que hacen los trabajadores. Yo tengo el sueldo congelado desde 2008 y ahora me lo van a congelar durante 3 más".
Los trabajadores aceptaron la semana pasada tener el sueldo congelado el año próximo y mantenerlo contenido -con leves subidas progresivas- los dos siguientes. Además, se comprometieron a un aumento de la productividad de 6% con un incremento del tiempo efectivo de trabajo a partir de abril de 2011, el establecimiento de 15 sábados productivos por turno -12 obligatorios- y una bolsa de 40 horas por trabajador, 32 de ellas obligatorias. El plan de reducción de costes fue avalado por Industria, UGT y Usoc y rechazado por CC OO.
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