Bruselas anuncia duras medidas contra las empresas de auditoría
La UE ve con temor que las cuatro mayores firmas controlen el 90% del mercado comunitario.- La Comisión quiere establecer una rotación obligatoria y dar más poder a los reguladores para fijar las condiciones de los contratos
Bruselas ha propuesto hoy endurecer la normativa sobre las firmas de auditoría y retirar el derecho de las empresas a elegir quién vigila sus cuentas para aumentar la transparencia, garantizar que los auditores sirven efectivamente a los accionistas en lugar de a sus clientes y reforzar la confianza de los inversores en la información financiera. La medida entra dentro de los planes de la Comisión Europea para reformar el sector financiero y evitar que crisis como la actual puedan volver a repetirse.
Así, tras cambiar el sistema de supervisión y colocar bajo la lupa a las agencias de calificación, el comisario de Mercado Interior, Michael Barnier, ha anunciado hoy que el próximo objetivo es acabar con el "oligopolio" de las auditorías ya que el 90% del mercado europeo está en manos de cuatro firmas, lo que en su opinión genera demasiado riesgo.
"¿Es sano que tengan los mismos clientes durante decenios y que sean los clientes los que escojan y paguen a sus auditoras?", se pregunta Barnier
Barnier ha avanzado que la propuesta de la Comisión es dar a los reguladores poder para delimitar "la selección, renumeración y duración" de los contratos de las auditorías, un sector dominado por las llamadas Big Four (las cuatro grandes: Deloitte, Ernst & Young, KPMG y PricewaterhouseCoopers). Por este motivo, Bruselas aboga por establecer una rotación obligatoria de los auditores para que ninguna empresa pueda tener siempre al mismo, cuando hasta ahora la norma solo instaba a sustituir a los socios responsables de llevar a cabo las revisiones. También propone conceder un pasaporte europeo a las auditoras que ahora operan exclusivamente a nivel nacional, como ya se ha hecho con los fondos de inversión, para favorecer la emergencia en el sector de nuevos actores de talla europea.
Los auditores, ha continuado el comisario, "tienen un importante papel que cumplir" ya que la veracidad de las informaciones financieras "es vital" para asegurar la confianza. Por eso se ha mostrado a favor de que estas firmas "sean fuertes y completamente independientes". Entre los argumentos de Bruselas, Barnier ha explicado que si quiebra una de estas compañías, entre el 20% y el 25% de las empresas europeas "no podrían presentar sus cuentas auditadas en el plazo exigido". El ejemplo más reciente, ha recordado, es la quiebra de Arthur Andersen tras el caso Enron.
Las inquietudes de la Comisión
"¿Es normal que las mismas empresas sean al mismo tiempo auditorias y consultoras? ¿Esta acumulación no provoca confusiones y conflictos de interés? ¿Es sano que estas compañías conserven los mismos clientes durante decenios y que sean los clientes los que escojan y paguen a sus auditoras? ¿Es posible una auténtica independencia en este contexto?", ha cuestionado Barnier.
En cuanto a quién supervisará a las firmas, la Comisión quiere que la responsabilidad corra a cargo de las nuevas Autoridades Europeas en lugar de ser una responsabilidad nacional. Finalmente, Bruselas se plantea simplificar las obligaciones de auditoría impuestas a las pequeñas y medianas empresas para que no resulten "asfixiadas". "La crisis ha puesto de relieve una serie de fallos en el sector de la auditoría y es preciso estudiar qué mejoras cabe introducir", ha insistido el responsable de Mercado Interior.
Como primer paso, Bruselas, que asegura que el debate está abierto y no hay ningún tema tabú, ha lanzado este miércoles una consulta pública para conocer la opinión de todos los interesados que estará abierta hasta el 8 de diciembre. Una vez analizados los resultados, presentará propuestas legislativas para regular el sector de la auditoría a lo largo del año 2011. También está pendiente un acuerdo entre los Veintesiete sobre la regulación de los fondos de inversión de alto riesgo.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.