Las asambleas de Terrassa, Sabadell y Manlleu crean Unnim

Segunda fusión de cajas atada ayer en Cataluña. El proyecto Unnim, suma de las cajas de Sabadell, Terrassa y Manlleu, obtuvo el visto bueno de sus respectivas asambleas generales, y por unanimidad. También Unnim empezará a operar el próximo julio, en este caso el mismo día 1, como una sola entidad, que está por ver cómo queda en la clasificación de cajas españolas por tamaño, a la espera del avance del resto de fusiones, con el plazo para recurrir al fondo de ayudas FROB firme hasta junio. En su caso, esta fusión requiere de 380 millones de euros de ayudas, que Unnim promete devolver en 3,5 años.

Al igual que en el caso de Catalunya, Tarragona y Manresa, las cajas del Vallès y Manlleu han sido asesoradas por el bufete Garrigues, pero se trata de dos planteamientos bien distintos. La fase transitoria en este caso agotará los dos años de plazo, para ir asentando la nueva identidad. El presidente de Unnim ?con casi 30.000 millones de activos?, será Salvador Soley (Caixa Sabadell) y el director general hasta la asamblea de 2011, Enric Mata (Caixa Terrassa), que contará con dos directores adjuntos: Dídac Herrero (Manlleu) y Jordi Mestre (Sabadell y, a la larga, director general). Durante la transición, la nueva caja tendrá 158 consejeros generales, que de forma definitiva se convertirán en 120, y en el consejo de administración se sentarán 24 miembros, aunque en la Unnim definitiva habrá sólo 16.

La reestructuración afectará a cerca de 530 personas, y la entidad resultante contará con 2.900 empleados. Cerrará 150 sucursales, para quedarse con 610, el 20% menos que la suma de las tres. De este proyecto se ha descolgado a mitad de camino Caixa Girona, con la voluntad declarada y persistente de seguir su camino en solitario. Sin embargo, está por ver si surte efecto la presión del Banco de España y de la Generalitat para convencer a Girona de la conveniencia de embarcarse en algún tercer proyecto en el mapa catalán.

El sindicato CC OO de Cataluña anunció ayer que pedirá formalmente a los partidos catalanes que apoyen la continuidad del modelo de cajas, así como que se mantengan las competencias de supervisión de la Generalitat. El secretario general de CC OO de Cataluña, Joan Carles Gallego, defendió que las cajas funcionan, y señaló que las cuotas participativas con derechos políticos, de introducirse, no vayan en detrimento de la naturaleza jurídica de las cajas ni de su obra social.