La deuda de regiones y municipios bate récords al superar los 66.800 millones en 2003

La deuda de las Administraciones territoriales alcanzó un nuevo máximo historico el pasado año al acumular 66.808 millones de euros, un 4,8% más que en todo 2002. El Banco de España cifra en el 5,9% del PIB el endeudamiento de las comunidades autónomas y destaca el significativo crecimiento del gasto en los ayuntamientos de grandes ciudades.

El endeudamiento de las comunidades autónomas en 2003 ascendió a 43.565 millones de euros, cifra que representa un incremento del 4,6% respecto a 2002, mientras que las corporaciones locales arrojaron una deuda de 23.243 millones, un 3,1% del PIB (un 5% más). La comunidad autónoma con mayor volumen de deuda fue Cataluña (9.665 millones de euros), seguida de Comunidad Valenciana (7.668 millones), Andalucía (7.338 millones), y Madrid (6.246 millones). Por debajo de los 1.000 millones de euros se encuentran Asturias (865 millones), Castilla-La Mancha (807 millones) y Extremadura (782 millones).

Según los datos del Banco de España, del total de la deuda de las corporaciones locales, la mayor parte (17.967 millones) corresponde a los ayuntamientos, de los que 7.726 millones son de capitales de provincia (incluidas las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla), y 10.241 millones del resto. Dentro del endeudamiento de las capitales de provincia, el organismo distingue entre la deuda de los ayuntamientos de más de 500.000 habitantes (Barcelona, Madrid, Málaga, Sevilla, Valencia y Zaragoza), que ascendió a 4.485 millones; y los de menos habitantes, que fue de 3.241 millones.

Por causa de este endeudamiento record, las Administraciones territoriales no cumplieron con sus objetivos de equilibrio fiscal en 2003, primer año de aplicación de la Ley de Estabilidad Presupuestaria. El ejercicio lo cerraron con un déficit público del 0,3% del PIB (0,18% las comunidades y 0,1% los municipios), cuando se habían comprometido a acabar en equilibrio técnico.

Aunque el 0,3% es una cifra inferior al 0,4% cosechado en 2002, en la práctica les obligará a presentar planes de saneamiento. Las necesidades que tienen para financiar sus crecientes gastos están provocando un debate sobre la búsqueda de recursos adicionales a la subida de impuestos. La opinión más aceptada es que tanto comunidades autónomas como ayuntamientos elevarán sus emisiones de deuda en los próximos meses.