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Schröder pide al BCE que estudie bajar los tipos para compensar el impacto del euro

Tras reclamar el canciller alemán medidas en pro de los exportadores, la moneda única rebasó los 1,25 dólares

El canciller alemán, Gerhard Schröder, ha vuelto a pedir hoy al Banco Central Europeo (BCE) que se plantee "intensamente" una reducción de los tipos de interés en la eurozona para contrarrestar la apreciación de su divisa respecto del dólar. El índice IFO, que elabora el instituto de investigación económica alemán, registró el primer descenso en 10 meses en febrero, tras sufrir un retroceso hasta 96,4 puntos desde los 97,5 de enero, y defraudó a los analistas, que habían pronosticado una tímida mejora.

En una entrevista con la cadena de televisión NDR recogida por Reuters, el canciller alemán hizo un llamamiento inusualmente directo a la entidad, alegando que la confianza empresarial en Alemania se resiente por la fortaleza del euro. "La debilidad del dólar y la fortaleza resultante del euro causa problemas para nuestras exportaciones", recordó Schröder, quien instó a la entidad encargada de la política monetaria del área a "hacer frente a eso con intensidad". A raíz de estas declaraciones, la moneda, que había retrocedido sensiblemente tras superar ayer la barrera de los 1,27 dólares, rebasó los 1,25.

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Las palabras del canciller sirven de preludio de la visita de dos días a EE UU que iniciará mañana, donde tratará con altos cargos estadounidenses y, previsiblemente con el presidente Bush, la situación de los tipos de cambio. Schröder hizo hincapié, no obstante, en que no teme una eventual interrupción de la recuperación económica, tras el letargo y la recesión inicial del año pasado. Schröder insistió en que no pretende interferir con la independencia del BCE, pero no escatimó una advertencia: "Con todo el debido respeto, hay motivos para contemplar una reacción de los tipos de interés", expresó.

La entidad emisora decidió, en su última reunión de principios de mes, mantener el precio del dinero en el 2%, un tipo director que los expertos creen durará al menos hasta el otoño, y no dio indicación sobre los movimientos que realizará en meses venideros, aunque sí condenó "movimientos bruscos" en los mercados de divisas. Ayer, las Naciones Unidas abogaron por una rebaja en el precio del dinero ante la posibilidad de que la recuperación económica de Europa se retrase a causa de la debilidad del dólar. Calificaron de "frágil" el crecimiento previsto del 1,9% del PIB para la zona este año, tras el exiguo 0,5% registrado en 2003.

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