Los antidisturbios liberan a los directivos retenidos 13 horas por los trabajadores de Fontaneda

Agentes de la Guardia Civil escoltaron hasta la salida, a las 23.30 horas de ayer lunes, a los seis representantes de la compañía americana United Biscuits retenidos casi 13 horas en las dependencias de la fábrica de Fontaneda, en la localidad palentina de Aguilar de Campoo, donde un centenar de trabajadores y más de 2.000 vecinos impedían que abandonaran la empresa.

El primer intento por parte de los antidisturbios, que llegaron pasadas las 22:30 horas a la fábrica, fue infructuoso. Entraron por la fuerza al interior de la factoría y después de rescatar a los retenidos tuvieron que volver sobre sus pasos, ya que los vecinos concentrados en las puertas le impidieron salir.

Casi una hora después, los agentes sí lograron salir de la fábrica por una salida secundaria para despistar a los vecinos y liberar a los directivos. Los antidisturbios han lanzado botes de gases lacrimógenos para dispersar a las personas que se agolpaban a las puertas de la fábrica. Por el momento se desconoce si hay o no heridos.

Los seis representantes de la empresa, entre los que se encuentran dos abogados, el director de Recursos Humanos de Artiach, Joaquín González; el director de Recursos Humanos de Marbú Navarra, Nacho Alonso, y el director general de Fontaneda en Aguilar, Javier Racillo, permanecían encerrados en una sala de la fábrica desde esta mañana.

Cierre irrevocable

Estos directivos habían llegado a las 7.30 horas de ayer a las dependencias de la fábrica para mantener una reunión con los miembros del Comité de Empresa. Ese encuentro duró sólo 10 minutos y finalizó cuando la empresa comunicó a los trabajadores que el cierre de la factoría es irrevocable.

Mientras, unas 2.000 personas se concentraban, desde las 8.30 horas, a las puertas de Fontaneda y cortaban uno de los carriles de la N-611 (Palencia-Santander), y otras 200 accedían al interior de la empresa y llegaban al despacho del director general, a quien increparon y pidieron explicaciones por el cierre.

La multinacional United Biscuits Group justificó el jueves pasado la decisión de cerrar la fábrica galletera de Aguilar de Campoo, cuya producción será absorbida por las de Viana (Navarra) y Orozco (Vizcaya), por la "infrautilización" del centro y la necesidad de reducir costes.

La plantilla de Aguilar de Campoo está compuesta por 212 operarios, para los que la empresa tiene previsto un plan que incluye la posibilidad de recolocación de una parte importante en otras unidades de producción de United Biscuits en España, así como prejubilaciones e indemnizaciones.

United Biscuits Group fue el resultado de la adquisición de United Biscuits (UB) por parte de un consorcio internacional integrado por Nabisco y diversos bancos y sociedades de inversión.