La Bolsa acoge con escepticismo las nuevas medidas económicas del Gobierno

Si las primeras en acusar este paquete de reformas fueron las Bolsas española y brasileña, temerosas de que el Gobierno haya iniciado un proceso paulatino de devaluación del peso, ayer, martes, le tocó el turno a la propia Bolsa de Buenos Aires. El lunes, los parqués español y brasileño sufrieron fuertes reveses. Brasil es el principal socio comercial de Argentina, mientras que las empresas españolas más importantes tienen fuertes intereses en el país.

La Bolsa de Comercio de Buenos Aires ha cerrado con una bajada del 4,6% en su principal indicador, como reacción a la "falta de confianza" de los inversores hacia las recientes medidas económicas, según los operadores.

Después del festivo, el Merval comienza la semana en baja y continúa con la tendencia que desde mitad de la semana pasada reinó en el mercado local.

En la sesión de ayer, en la que el Merval ha cerrado en 418,08 puntos, se han intercambido acciones por un valor de 32 millones de pesos (o dólares) y se han registrado cuatro subidas, 30 bajadas y cuatro acciones han permanecido sin cambios.

Las bajadas más importantes han correspondido a las acciones de Telefónica (-9,79%), Comercial del Plata (-6,45%), Telecom (-6,33%) y Grupo Financiero Galicia (-6,17%). La subida más importante ha sido para Transportadora de Gas del Sur (+0,75%).

El índice general de la bolsa bonaerense ha cerrado con una pérdida del 4,68% y ha llegado a los 14.238,39 puntos.

Fuentes bursátiles han señalado que la bajada de ayer ha estado motivada por la desconfianza de los inversores en torno a las nuevas medidas anunciadas el viernes pasado por el ministro de Economía, Domingo Cavallo.

El temor se centra principalmente en una medida para favorecer al sector exportador que implica una corrección en el tipo de cambio para el comercio exterior, que será variable y se fijará de acuerdo a la diferencia entre el dólar y el promedio de la divisa estadounidense y el euro.

"Los inversores temen que esta medida sea un principio de devaluación que luego pueda extenderse a otros sectores", ha dicho un operador local.

Según la misma fuente, los inversores no ven "con buenos ojos" esta medida y tampoco creen que este plan favorezca la reactivación.

"Afuera quieren medidas claras que muestren un recorte de gastos, y los inversores consideran que estas medidas favorecen a sectores puntuales pero no son el motor para generar la reactivación económica", ha añadido un operador.

En la sesión de ayer, el llamado "riesgo país", que compara las tasas que se pagan por los títulos de deuda argentina con similares de EE UU, terminó con un índice de 991 puntos, nueve por debajo del cierre del lunes, cuando trepó hasta los 1.000 puntos después de haberse mantenido por debajo de ese nivel en los días anteriores.

Los agentes del mercado local coinciden en que los inversores dudan de la eficacia de los planes para reactivar la economía argentina, que sufre una recesión desde mediados de 1998, y también están preocupados por el brote de violencia social registrado en la norteña provincia de Salta.

Cavallo defiende las reformas

El ministro de Economía, Domingo Cavallo, se ha reunido con banqueros y empresarios a quienes ha pedido que contribuyan a que los inversores extranjeros "entiendan bien" los alcances de las medidas, que no afectarán a la convertibilidad peso-dólar vigente en el país desde 1991.

En este sentido, Cavallo ha reiterado que las medidas del gobierno apuntan a alentar el consumo interno por medio de una rebaja de impuestos a las ganancias de las capas medias y altas de la población y fomentar las exportaciones con un tipo de cambio especial, sin modificar el modelo económico vigente.

"Nos van a entender cuando la economía esté plenamente reactivada y hayamos vuelto a crecer; antes va a ser difícil", ha admitido Cavallo tras recordar que los mercados tampoco entendieron cuáles eran las metas de su gobierno cuando hace diez años se puso en marcha la actual política monetaria de convertibilidad.