_
_
_
_

Cuatro en la ejecutiva

La presencia de cuatro valencianos en la dirección surgida del 38º Congreso del PSOE puede resultar engañosa. La delegación evidenció públicamente su división en la primera jornada del congreso cuando llegó a haber cinco peticiones de palabra de dirigentes del PSPV-PSOE. Al final, el secretario general habló en nombre del PSPV-PSOE y sólo Manuel Mata, que aspira a disputarle el liderazgo, lo hizo también para rechazar la gestión de Zapatero.

La numerosa presencia valenciana es fruto de la conjunción de tres factores. En primer lugar, Rubalcaba ha querido reforzar a Jorge Alarte frente a una melé de sectores y corrientes que le estarían pidiendo ya la dimisión si hubiese ganado Carme Chacón por haberle apoyado. Ahora si el argumento es que perdió unas elecciones, y por eso tiene que marcharse, el PSOE acaba de decidir precisamente apostar al liderazgo de quien perdió las últimas generales.

En segundo lugar, Rubalcaba ha premiado a quienes le votaron. De ahí ha sacado petróleo Francesc Romeu. Y en tercer lugar, Rubalcaba ha querido dar una plaza simbólica a quienes apostaron por su rival, Carme Chacón, en una federación en la que fueron mayoría de cara al Congreso federal. Una plaza simbólica. No ha puesto un solo dirigente que pueda crearle problemas a Alarte. El nuevo líder del PSOE ha reiterado "unidad y unidad". Algo que tendrán que pararse a pensar en el PSPV qué quiere decir.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_