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El triunfo de Gingrich siembra el caos entre las filas republicanas

Antonio Caño

La abultada victoria de Gingrich sobre Romney en Carolina del Sur ha sembrado el desconcierto en el Partido Republicano. Este resultado inesperado abre un largo y tortuoso proceso de selección del candidato presidencial. El poder acumulado por la extrema derecha desde 2009 se vuelve ahora en contra de la dirección del partido en el momento de elegir un candidato moderado capaz de atraer el voto independiente. Mitt Romney parecía ofrecer el perfil ideal. Pero el Tea Party ha encontrado en Newt Gingrich al hombre capaz de conjugar el conservadurismo con la elegibilidad. El próximo capítulo: la batalla por los votos de Florida, el día 31.

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