"Revisar el Estatuto y la LTH no es anatema para el PNV"
Iñigo Urkullu justifica la necesidad de acometer una segunda transición por la crisis económica e institucional. No se opone a revisar el Estatuto y la LTH y pide un relato sobre la violencia al que sea ajeno la izquierda abertzale, su rival electoral.
Pregunta. ¿ETA sigue existiendo?
Respuesta. Sigue existiendo. Mientras no anuncie su disolución, ETA sigue existiendo.
P. ¿Las últimas detenciones pueden hacer al Gobierno de Rajoy más reticente al abordar los temas pendientes con Euskadi?
R. No, espero que no. Todos somos conscientes de que el proceso del fin de una organización terrorista, tras más de 50 años de historia tiene que ser largo, pero con consciencia de que ha habido un comunicado de cese definitivo de la lucha armada y que cada día que pasa es un día ganado, al margen de elementos aislados. Confío en que el PP no se deje llevar por discursos alarmistas tras este episodio.
"La crisis económica e institucional nos lleva a una segunda transición"
"Mientras ETA no anuncie su disolución, sigue existiendo"
"Tiene que quedar claro quién ha cometido horrores y quién es el sufridor"
"Tengo confianza en que el PNV ganará" a la izquierda 'abertzale'
P. ¿Pero si no se cumplen los acuerdos o las conclusiones de la Conferencia de Aiete el tema puede ser reversible?
R. ¿Qué es lo que ha de cumplirse en cuanto a las conclusiones de Aiete? ¿Qué son las consecuencias? También como consecuencias está el reconocimiento de daño causado y, también, lo que es una política penitenciaria, la reinserción, la resocialización. Creo que la propia organización terrorista y la izquierda abertzale es consciente de que por mucha declaración de Aiete, eso hay que saber gestionarlo.
P. ¿Su agenda y la del lehendakari en que pueden coincidir de cara a la reunión con Rajoy?
R. Me gustaría que coincidieran tanto en lo pueda ser la preocupación por las medidas del Gobierno español ante la crisis y que no tenga un sesgo de recentralización, así como en pedirle el compromiso de profundizar en el autogobierno. Y también coincidir en que vivimos un tiempo diferente desde el 20 de octubre pasado y que hay que abordarlo desde la generosidad en cuanto a la flexibilidad con el que el Estado de Derecho se tiene que producir.
P. ¿Cómo se plantea el escenario de sus relaciones con Rajoy? ¿Atisba retroceso autonómico?
R. No si el PP es cumplidor de lo que hasta ahora está diciendo también en el ámbito de la política de pacificación, del cumplimiento de la legalidad existente, de la Constitución y el Estatuto, pero eso no me hace estar tranquilo a la vista de determinados posicionamientos como el de ministro de Hacienda.
P. ¿Teme un retroceso?
R. Yo creo que el PP también tendrá que liberarse de ataduras del pasado y que sea consciente de la voluntad de una mayoría en la sociedad vasca, y de su peso en los resultados electorales del País Vasco en las elecciones generales o en las elecciones municipales y forales. Pienso que el PP español también será consciente de cómo se va a ir construyendo la Unión Europea, de qué es lo que está sucediendo en el Reino Unido, qué es lo que está sucediendo entre Inglaterra y Escocia.
P. Aludió a Escocia ante la asamblea del PNV. Explíquenos las similitudes con el País Vasco.
R. Es la voluntad política de un partido nacionalista hoy gobernante de impulsar un proceso de consulta a la ciudadanía. El primer ministro británico ha planteado que sea en un tiempo determinado y una pregunta clara sobre independencia. La similitud está en la voluntad del Partido Nacionalista Escocés de avanzar en un proceso. Nosotros le miramos en cuanto a la consulta, pero creo que es Escocia quien mira a Euskadi.
P. ¿Hasta dónde coincidió con Zapatero sobre el dibujo del mapa vasco?
R. No avancé mucho, porque veníamos del portazo al Nuevo Estatuto Político presentado por el lehendakari Ibarretxe y de lo que había sucedido con el Estatuto de Cataluña. Zapatero y su Gobierno han vivido muy condicionados por esos hechos. No hemos podido avanzar. Cuando yo le planteo avanzar en 2008, vienen las autonómicas, con la conformación del Gobierno de Patxi López. Le digo qué posibilidades había de trabajar y se mostraba bastante resistente y a partir de la crisis económica hemos tenido que trabajar en otros ámbitos, que han sido el de la pacificación y el de la crisis económica.
P. El PP, mayoría absoluta y con apoyo de CiU. ¿Teme el PNV verse desplazado de la capacidad de decisión en Madrid?
R. No. En política hay que trabajar en función de las circunstancias y de los tiempos. En los últimos años hemos aprovechado las circunstancias que se nos han presentado.
P. ¿Cree que Rajoy ha engañado a los ciudadanos con sus medidas económicas?
R. No sé si ha engañado, pero que no ha sido claro, sí, y me choca, al igual que chocan las medidas planteadas por decreto ley con algunas cosas que dijo en la sesión de investidura. El PP es perfectamente conocedor desde agosto del año pasado de cuál es la situación.
P. ¿Mirarán de reojo lo que hace Amaiur en el Congreso?
R. No. He hablado con nuestros portavoces Josu Erkoreka y Joseba Zubia y no vemos que haya iniciativas por parte de Amaiur. Amaiur, o la izquierda abertzale ampliada, sigue viviendo del victimismo, de las grandes proclamas, pero eso no nos lleva a ningún sitio.
P. ¿Cuando habla con la izquierda abertzale les plantea cómo tiene que ser la convivencia sin ETA o ni lo intenta?
R. Estoy siguiendo con especial todo lo relativo al Centro de la Memoria. Me preocuparía que la sociedad vasca hiciera un paso de página inmediato. Hay que dejar a las generaciones venideras un relato lo más real posible, cada uno desde su perspectiva, pero sí que haya un relato con claridad en quién ha cometido los horrores, quién ha sido el sufridor, y la izquierda abertzale tiene que participar de ese esfuerzo de relato, pero desde la premisa de que no se va a pasar página.
P. ¿En qué se diferencia su discurso abertzale del de Arnaldo Otegi, por ejemplo?
R. En el modelo de sociedad, en los modos, en la consciencia de que la voluntad de la sociedad vasca tiene que estar por encima de todo, en que nuestro nacionalismo es integrador y no es excluyente, en la pluralidad de la sociedad vasca.
P. ¿Cree que ellos les pueden ganar en las autonómicas?
R. Tengo confianza en que el PNV ganará las elecciones, cuando sean.
P. ¿Si fuera necesario, recurriría a los votos del PP para recuperar el Gobierno vasco?
R. Nunca he hablado de apriorismos. Primero, presentémonos cada uno ante la sociedad y, segundo, en base a los resultados confrontemos proyectos, confrontemos programas.
P. ¿Cree que aquí tenemos dos y tres cosas de todo?
R. No. En algunas cosas sí, pero también digo que hay dos cosas de todo en función del Gobierno español y del Gobierno vasco. O sea, se habla de un informe de duplicidades de lo que son competencias de Gobiernos y de Diputaciones o Ayuntamientos, y no se habla de duplicidades de lo que son competencias del Estado y competencias de la Comunidad Autónoma del País Vasco por ejemplo. Pues hagamos el análisis global y también pormenorizado de todas las cuestiones, pero tengo que decir también que el modelo ha funcionado hasta la fecha.
P. ¿Habría que revisar el Estatuto?
R. Revisar el Estatuto es lo que se propuso en el año 2004. No es anatema para el PNV ni tampoco lo es el de la LTH. Todo es revisable, pero sin apriorismos, con calma, con sosiego, con serenidad.
P. ¿En Madrid, su idea del estatus político puede verse como otro plan Ibarretxe?
R. Si se le quieren poner etiquetas a las cosas, no voy a impedirlo. Lo he planteado desde febrero de 2010 en base a que todo es revisable en el tiempo. Merece la pena saber si la realidad ante la que operamos es la misma de hace 30 años. Lo que he planteado es que una crisis económica ha derivado en una crisis institucional, que afecta a las comunidades autónomas. Ahí está el límite de déficit, el límite de gasto, la estabilidad presupuestaria, todo como consecuencia de una crisis institucional: la crisis económica, la crisis política. Todo esto nos lleva a la necesidad de una segunda transición.
"A todo vasco le tiene que ilusionar ser 'lehendakari"
Pregunta. ¿Puede ser perjudicial esa imagen de excesiva prisa por recuperar el Gobierno?
Respuesta. No, pero es que tampoco tenemos obsesión por mucho que se lleve a titulares en medios de comunicación. Tenemos preocupación por la falta de gobierno, por la falta de proyecto, por la falta de programa existente, porque da la impresión que estamos ante una política de ocurrencias, un día se dice una cosa y al siguiente, la contraria. Esa es la preocupación que a mí me lleva a hablar de desgobierno y de la necesidad de un Gobierno de verdad.
P. ¿Contempla que PSE y Bildu se entiendan? ¿Es pronto?
R. Más desde la izquierda abertzale que del PSE se han leído declaraciones de apostar por la vocación de entenderse. Ya lo estamos viendo en Ayuntamientos, Juntas Generales y Diputaciones. No creo que es pronto; eso se decía hace ya siete años.
P. ¿Qué discurso le queda al PNV en Gipuzkoa para poder recuperar terreno?
R. El discurso que la propia organización asumió tras las elecciones municipales y que lo concretó en un plan de acción en octubre del año pasado, de que estamos en la oposición en la mayoría de las instituciones. El PNV ya ha visto esta misma semana la actitud de Bildu en la Diputación de Gipuzkoa.
P. ¿Hubiera dado usted el apoyo a los presupuestos?
R. Lo debatimos en el EBB y, quizás, habría que haber valorado muy bien lo que supondría el acuerdo presupuestario en cuanto a la política. Nosotros planteamos las condiciones del plan anticrisis y de la incineradora. Esperemos que se cumpla.
P. Si les siguen mordiendo la mano, ¿se puede plantear un momento de censura?
R. Es prematuro.
P. ¿Qué no le gusta de la política de Joseba Egibar?
R. No me corresponde a mí juzgar eso, sino a la filiación del PNV en Gipuzkoa.
P. ¿Rubalcaba o Chacón?
R. Nunca he entrado en las cuestiones de otros partidos.
P. ¿Le ilusiona ser lehendakari?
R. A cualquier ciudadano vasco o vasca le tiene que ilusionar ser lehendakari.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.