Valencia recibe con reticencias que la F-1 se alterne con Barcelona

El vicealcalde de Valencia, Alfonso Grau, salió ayer en defensa de la celebración del Gran Premio de Europa de Fórmula 1 en la capital. Tras afirmar que este acontecimiento deportivo deja en la ciudad cada año 55 millones de euros - "mucho dinero", remarcó Grau -, advirtió de que si al final se celebra de forma alterna en Valencia y Barcelona, como se baraja, los beneficios llegarán un año sí y otro no.

Para enfatizar el valor de un evento de estas características, el número dos del Ayuntamiento de Valencia añadió que "deberíamos acostumbrarnos" a la mentalidad anglosajona: "Una cosa es lo que la Generalitat tiene que aportar para que la competición se celebre y otra el beneficio que luego va al bolsillo de los ciudadanos y su entorno". En cualquier caso, Grau subrayó que si así lo deciden Bernie Ecclestone, patrón de la Fórmula 1, y el presidente de la Generalitat "bienvenido sea". En público lo han negado pero la diferencia de criterio de la alcaldesa Rita Barberá y el presidente Alberto Fabra en torno a la revisión del gran premio ha sido otro punto más de tensión entre ellos.

Precisamente ayer, en unas declaraciones publicadas en el Financial Times, el británico Bernie Ecclestone se mostró abierto a la idea de que Valencia y Barcelona se alternen como sedes del Gran Premio de Europa de Fórmula 1.

Ecclestone aseguró que el año pasado firmó un acuerdo a largo plazo con el Gobierno valenciano pero que las autoridades de esta comunidad autónoma no han hablado todavía con él sobre este asunto. "Lo que se ha hablado más bien ha sido si a Barcelona le gustaría alternarse con Valencia. Puede que sea una buena idea. Tal vez sea el camino a seguir", comentó el patrón de la F-1.

La situación de las cuentas públicas de la Generalitat, que tiene una deuda de miles de millones de euros, ha llevado a políticos de la oposición y otros colectivos a cuestionar la celebración del gran premio en un momento de severos recortes. Así, la portavoz de Grandes Proyectos del Grupo Socialista en las Cortes Valencianas, Eva Martínez, pidió recientemente al presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, que cancele el Gran Premio de Europa de Fórmula 1 en Valencia debido a la crisis.

Fabra dijo la semana pasada que en 2012 volverá a celebrarse en Valencia el Gran Premio de Europa de Fórmula 1 en las fechas previstas del 22 al 24 de junio, porque "hay un contrato firmado que habrá que cumplir" con la empresa organizadora, pero dijo que intentará "renegociar" sus términos. El vicepresidente valenciano, José Ciscar, no descartó la posibilidad de alternar con Cataluña el Gran Premio para que sea "menos gravoso" o que Canal 9 no lo retransmita, para reducir costes, siempre que se cumplan los contratos ya suscritos.

Antes de que lo estudiase el propio Fabra, el Gobierno catalán se lo propuso el pasado mes de junio al todavía presidente valenciano, Francisco Camps, que lo rechazó. Las conversaciones entre los dos Ejecutivos sí han cristalizado con el Consell de Fabra, aunque todavía no hay nada decidido. Solo se da por sentado que habrá cambios.

La celebración de siete ediciones del gran premio costará al sector público valenciano cerca de 250 millones de euros.

El Gobierno de Fabra ha intentado sin éxito revisar e incluso romper el contrato con Ecclestone pero, como sucede con otros eventos, la penalización es tan costosa como mantener las condiciones pactadas.