La oposición critica a Fabra por el recorte al presupuesto recién aprobado
El discurso de Año Nuevo del presidente Alberto Fabra en general y, ya en particular, el anuncio de que meterá la tijera en los presupuestos de 2012 para recortarlos en 1.000 millones, recibieron ayer numerosas críticas. El secretario general de los socialistas valencianos, Jorge Alarte, exigió a Fabra "que se deje de palabras vacías y grandilocuentes sobre posibles e hipotéticas conductas correctas en la vida pública, porque él no actúa contra la corrupción y mira hacia otro lado". Se refería a estas palabras de Fabra: "Los políticos tenemos que ganar en credibilidad siendo ejemplares en nuestra gestión y comportamiento". Una frase que Alarte traduce como que Fabra "miente y sonríe", ya que "dice lo contrario de lo que hace, hablando de conductas ejemplares, mientras juzgan al expresidente de la Generalitat Francisco Camps, y a Ricardo Costa, dos diputados autonómicos de su propio partido, y él no hace absolutamente nada al respecto". Y fue más duro al acusar al presidente de "permitir que la corrupción se instaure y se extienda en la Comunidad Valenciana, mientras él sólo mira hacia otro lado".
En cuanto a los recortes, Alarte explicó que "Fabra ha enmendado unos presupuestos de la Generalitat Valenciana que eran mentira, generarán más paro y cierre de empresas, así como un deterioro de los servicios públicos más básicos". Y le exigió que aclare si está pensando en instaurar el copago en sanidad.
Por su parte, el portavoz adjunto de EUPV en las Cortes Valencianas, Lluís Torró, aseguró que el discurso de Fabra dejó patente "la falta de planificación de este gobierno, que hace este anuncio después de haber aprobado unos presupuestos autonómicos solo diez días antes". Torró acusó al presidente de "pervertir la democracia" y denunció que el PP "impone, hace y deshace, pervirtiendo los procedimientos democráticos y ninguneando a la oposición".
La diputada de Compromís Mireia Mollà también criticó que Fabra pida "corresponsabilidad en la financiación de los servicios públicos" cuando estos son "insuficientes". Y añadió: "Lo primero que tiene que hacer es garantizar la construcción de las infraestructuras pendientes y asegurar unas prestaciones de calidad",
Desde Unión Progreso y Democracia (UPyD), Romain Muzzati criticó las palabras de Fabra después de "tres lustros de desgobierno del PP". En un comunicado señaló que el discurso "confirma el absoluto desgobierno por parte de un Partido Popular que, después de 16 años en el gobierno, trata de seguir la estela del discurso de Mariano Rajoy a nivel nacional".
Las críticas también llegaron desde los sindicatos. El secretario general de CC OO-PV, Francisco Molina, considera que las medidas anunciadas son un "fraude democrático" porque modifican el presupuesto autonómico "de forma unilateral" y apenas una semana después de su aprobación. Molina insistió en criticar el "incumplimiento sistemático del presupuesto". Además, para CC OO, la política de recortes "carece de una visión global de lucha contra la crisis, pues constituyen un conjunto de medidas inconexas y de parches improvisados".
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