Un ingeniero y dos tragedias

El mismo ingeniero de caminos se ha topado con dos de los siniestros más sonados de Barcelona en los últimos años. Javier Gete-Alonso, director de obras durante el hundimiento del túnel del Carmel en 2005, está ahora imputado en la causa judicial que investiga el accidente de El Péndulo, la atracción del parque Tibidabo cuyo desplome provocó, en 2010, la muerte de una adolescente de 15 años.

Un año después del derrumbe del túnel de maniobras en el Carmel -que obligó a desalojar a 1.200 vecinos del barrio y provocó una tormenta política- Gete-Alonso firmó un plano sobre el diseño de los tornillos que debían sujetar firmemente El Péndulo. Esos tornillos acabaron, tiempo después, saltando de la base. La investigación del accidente mortal sigue en marcha y Gete-Alonso es uno de los cerca de 20 profesionales imputados.

Gete-Alonso firmó aquel documento como ingeniero de la empresa Intec Gestión Integral de Proyectos, donde sigue trabajando. La empresa municipal que gestiona el parque, Patsa, encargó a Intec el diseño de los tornillos, una de las múltiples causas que, según fuentes judiciales, explican el accidente. Los informes periciales apuntan a defectos e irregularidades en la fabricación, la instalación y el mantenimiento de El Péndulo.

El ingeniero de caminos ha declarado como imputado, como ya hizo en su día por el hundimiento del Carmel. Gete-Alonso era el director de las obras de prolongación de la línea 5 del metro cuando ocurrió el accidente, el 25 de enero de 2005. En febrero del año siguiente explicó, durante más de seis horas, que no dio la orden de excavar sobre la base del túnel de maniobras del Carmel, una de las causas del hundimiento. Gete-Alonso, que se define en su perfil profesional en internet como un "profesional independiente en el sector de ingeniería civil", se exculpó y dijo que era imposible tener a una persona controlando las obras 24 horas al día. El ingeniero de caminos ya había tenido que declarar, poco antes, en la comisión de investigación parlamentaria sobre el siniestro.

La juez que investigó el caso del Carmel archivó, en 2008, las actuaciones contra los cinco imputados por los daños ocasionados a los vecinos, que fueron indemnizados, recuerda el que entonces fue abogado del ingeniero, Mario Pascual Vives. Este diario intentó ponerse en contacto con Gete-Alonso sobre su implicación en el caso de El Péndulo, pero un responsable de la empresa Intec que dijo hablar "en su nombre" rehusó hacer comentarios.

La investigación de la tragedia está tocando a su fin. El pasado noviembre declaró ante la juez uno de los últimos imputados: el propietario de la empresa fabricante de la atracción, quien aseguró que el cliente -o sea, el Tibidabo- era responsable del anclaje de la instalación.