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Bildu admite su escaso margen para sacar adelante las cuentas de Gipuzkoa

El presupuesto de Garitano recibe tres enmiendas a la totalidad y 400 parciales

Mikel Ormazabal

A Bildu se le ha puesto muy cuesta arriba la aprobación de los presupuestos de Gipuzkoa para 2012. El proyecto económico que ha presentado el Gobierno foral, en minoría con 22 de los 51 representantes de las Juntas Generales, ha recibido un rechazo sin paliativos de los principales grupos políticos de la oposición. Como anunció este diario el pasado domingo, el PNV, los socialistas y el PP han presentado sendas enmiendas a la totalidad, lo que deja "poco margen" para renovar las cuentas del territorio, según fuentes de la coalición independentista. Además, el proyecto presupuestario ha recibido 400 enmiendas parciales.

La ausencia de medidas de apoyo a la actividad económico-empresarial, la falta de impulso a los proyectos estratégicos y las dudas sobre el modelo de gestión de los residuos son las principales tachas que plantean los partidos en sus enmiendas a los presupuestos. Bildu admite que la oposición "complica" la aprobación de las cuentas, pero "para nada resulta imposible" lograr un acuerdo con algún grupo, asegura un representante de esta formación.

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El pleno de la Cámara provincial debatirá el próximo 12 de diciembre las enmiendas de totalidad, que se votarán en bloque. Si Bildu no logra antes de esa fecha el apoyo de alguno de los partidos que ha presentado una enmienda a la totalidad, el proyecto presupuestario sería devuelto a la Diputación y las cuentas quedarían automáticamente prorrogadas, algo que no sucede en Gipuzkoa desde 2003.

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El presupuesto que plantea la Diputación asciende a 679,5 millones de euros. "Es un presupuesto de crisis, con muchos ajustes y una partida para gasto social intocable", asegura Bildu. La bajada de los ingresos, añade un representante de la coalición, obliga a "taparnos la cabeza o taparnos los pies", puesto que "la manta es muy corta".

El PNV, que también ha registrado 180 correcciones parciales, expresó ayer su voluntad de llegar a un acuerdo con el Gobierno foral. Prueba de ello fue la "mano tendida" de su portavoz, Markel Olano, para continuar negociando, porque, según dijo, en un contexto de crisis es "muy importante" evitar la prórroga. Por eso, reclamó "flexibilidad" al diputado general, Martin Garitano. La construcción de la incineradora, el proyecto cultural de Tabakalera y el apoyo a la empresa guipuzcoana son cuestiones "nucleares" que el PNV va a poner encima de la mesa negociadora.

El PSE justifica su enmienda a la totalidad en que Bildu apuesta por políticas que son "incapaces para resistir la crisis y crear empleo". Su portavoz, Rafaela Romero, criticó la "inadecuada" filosofía presupuestaria de Bildu para la promoción y creación de empleo y la modernización de las infraestructuras: "No se apuesta por la mejora del bienestar de la ciudadanía y se va a paralizar el territorio en 2012". Los socialistas también han tramitado 159 enmiendas parciales que suman 13,1 millones.

Para los populares, las cuentas de Bildu "no priorizan ni dan respuesta al objetivo estratégico de impulso a la economía, ni a la generación de empleo", afirmó Juan Carlos Cano. Este partido propone crear un departamento de Promoción Económica que gestione 125 millones. Su única enmienda parcial, dotada con 22,6 millones, persigue impulsar el metro, la estación de autobuses de San Sebastián, la incineradora y la regeneración de Pasaia.

Aralar es el único grupo que no presenta enmienda a la totalidad, aunque sí ha registrado 60 iniciativas parciales.

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Sobre la firma

Mikel Ormazabal
Corresponsal de EL PAÍS en el País Vasco, tarea que viene desempeñando durante los últimos 25 años. Se ocupa de la información sobre la actualidad política, económica y cultural vasca. Se licenció en Periodismo por la Universidad de Navarra en 1988. Comenzó su carrera profesional en Radiocadena Española y el diario Deia. Vive en San Sebastián.

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