López planteará a Rajoy "una política penitenciaria diferente"
El 'lehendakari' espera "máxima sintonía" en la cita que apalabraron el jueves
El lehendakari, Patxi López, acudirá a su primera reunión con Mariano Rajoy, una vez este sea investido presidente del Gobierno, con el decálogo de actuaciones que presentó en el Parlamento vasco en el pleno de política general de septiembre, un mes antes de que ETA convirtiera en definitivo su alto al fuego. López defenderá ante Rajoy la conveniencia de abordar "una política penitenciaria diferente". A ello se refirió ayer, aunque sin más concreciones, durante el pleno de control al Ejecutivo de Vitoria.
López aprovechó su respuesta a una interpelación del parlamentario de EB, Mikel Arana, para expresar su intención de "colaborar" con el Gobierno central salido de las urnas del pasado domingo en la definición de los pasos que se deben seguir desde ahora, así como la de hacerlo con "convicción y lealtad".
El PP supedita el cambio al desarme y el reconocimiento del daño causado
López quiere consenso para "el reto histórico de enterrar" a ETA
Frente a quienes en Euskadi le interpelan y le urgen a precisar propuestas y dar pasos concretos -en realidad todas las fuerzas políticas vascas, salvo el PP y UPyD-, el lehendakari indicó que "no pasa nada" por esperar a esa reunión con Rajoy, aún sin fecha, pero ya apalabrada para después de la investidura en diciembre.
El lehendakari y el presidente del PP y ganador de las elecciones mantuvieron el pasado jueves una breve conversación telefónica en la que convinieron, según dijo López, "un encuentro sosegado para cambiar impresiones" ante "el reto histórico de enterrar el largo ciclo de la violencia terrorista". La conversación se produjo a las pocas horas de conocerse las declaraciones del presidente del PSE-EE, Jesús Eguiguren, en las que ponía sobre la mesa la posibilidad de romper el pacto vasco con el PP si Rajoy "no empuja a favor de la paz".
Aunque también dijo creer en que la colaboración entre ambos Gobiernos será posible, el presidente del PSE advirtió que, en caso de no ser así, "habría que enfrentarse al Gobierno de Madrid" y ello supondría "la ruptura con el PP en Euskadi". López obvió ayer en la tribuna hacer cualquier referencia a esas palabras.
El lehendakari se mostró esperanzado en encontrar "la máxima sintonía" con Rajoy para definir las actuaciones que entiende que procede abordar. Recordó que el Gobierno vasco que preside cuenta ya con una hoja de ruta "con la que se va a manejar en este nuevo tiempo". Una parte esencial de ella, la referida a la política penitenciaria, depende en su integridad del Ejecutivo central, recordó. Por ello resulta esencial esperar a su constitución, para contar con esa "pieza que falta del puzzle", aseveró.
López y Rajoy pueden chocar en los tiempos: mientras el primero cree que una vez que ETA anunció su cese definitivo no se puede ya mantener la misma política carcelaria, o abogaría por facilitar el regreso a España de huidos sin causas pendientes, así como por la legalización de la izquierda abertzale -en manos de los tribunales-, la posición del PP la expresó ayer su presidente vasco, Antonio Basagoiti, en Radio Euskadi: quien puede conseguir que cambie la política penitenciaria es la izquierda abertzale si reconociendo "el daño causado" y garantizando "que ETA entrega las armas". En todo caso, el lehendakari quiere que la que se adopte sea lo más consensuada posible para evitar que resulte motivo de disputa política.
El presidente del PNV, Iñigo Urkullu, descalificó a priori la cita: "nada" de lo que lehendakari traslade a Rajoy será "novedoso", porque ya se lo ha dicho antes el PNV, sentenció en otra entrevista radiofónica.
Sanidad indaga el caso de la mujer de Elciego
El Departamento de Sanidad investiga el caso de la mujer de Elciego (Álava) que se seccionó un dedo y a la que el hospital San Pedro de Logroño se negó a facilitar una ambulancia para trasladarla a San Sebastián donde se le debía reimplantar por microcirugía antes de seis horas. Aunque el Gobierno riojano trató de desvincular este caso, revelado ayer por EL PAÍS, de su negativa a atender a nuevos pacientes de la comunidad autónoma, lo cierto es que solo puede enconarla.
El portavoz del Gobierno riojano, Emilio del Río, aseguró que se realizó el procedimiento habitual "cuando no hay amenaza vital". El consejero de Sanidad, Rafael Bengoa, cuestionó que se hubieran cumplido los protocolos para el transporte de enfermos procedentes de otras comunidades autónomas.
El Gobierno vasco recabará más información, dijo Bengoa en la sesión de control del Parlamento ayer, donde tres parlamentarios distintos, del PNV, UPyD y EA, le interpelaron sobre el contencioso que salió a la luz hace un mes por la negativa de La Rioja atender a nuevos pacientes de localidades vascas limítrofes. "Queremos saber más porque es un caso grave, ya que se trataba de una urgencia".
La mujer debió esperar a que llegara una desde Vitoria. El consejero señaló, en coincidencia con el portavoz de UPyD, Gorka Maneiro, coincidieron en señalar que Sanz se está comportando como "un independentista". "El PP de La Rioja ha decidido tratar a los vascos como a extranjeros y romper la cohesión sanitaria", acusó Maneiro.
La peneuvista Nerea Antia convino con Bengoa en la existencia de motivos políticos y electoralistas tras la orden del presidente riojano, Pedro Sanz, de denegar las asistencias, pero asguró que observa "un planteamiento muy cerrado por ambas partes". Bengoa le respondió que el Ejecutivo socialista no variado en nada la actuación "de décadas" de los anteriores, bajo liderazgo del PNV, y atribuyó al gobierno de La Rioja haber empezado a romper "el concepto de solidaridad nacional".
El consejero recalcó que los 400 pacientes afectados están siendo ya atendidos por Osakidetza, en espera de que la negociación con la comunidad vecina fructifique. En principio, ambas partes se han fijado el 1 de diciembre como referencia para un acuerdo. Este no conllevará en ningún caso, aseveró, transacción económica, pero no precisó qué servicios nuevos ha ofrecido en su propuesta de acuerdo.
También rechazó la opinión de Maneiro, para quien falla "el sistema en su conjunto", por la existencia, dijo, de "17 reinos de taifas sanitarios creados por PP-PSOE". "El sistema es de los más solidarios del mundo y funciona tan bien como en Suiza o Alemania", defendió el consejero.
Bengoa se mostró abierto a incoporar especialidades al hospital de Leza, hoy dedicado a pacientes crónicos y terminales tal y como le reclamó Juan José Agirrezabala, de EA.
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