Gipuzkoa reclama en Madrid una línea especial de ayudas por las inundaciones

La Diputación de Gipuzkoa, gobernada por Bildu, viaja hoy hasta Madrid para reclamar al Gobierno central "una línea especial de ayudas" con la que cubrir las perdidas de las inundaciones. La diputada de Administración Foral y Función Pública, Garbiñe Errekondo, encabezará la comisión, enfrente se encontrará con representantes del Ministerio de Interior. La institución foral anunció ayer su decisión tras la reunión del Consejo de Diputados y ante la previsión, aunque no supo dar cifras, de que la cuantía de los desperfectos ocasionados por las fuertes lluvias de hace dos fines de semana "superen con creces" las ayudas previstas en el Real Decreto, que regula las subvenciones por situaciones catastróficas.

"Todo es mejorable. El servicio prestado fue adecuado", según el ente foral

El texto cubre, entre otras cosas, daños en viviendas particulares, comunidades de vecinos y empresas. En el supuesto de la destrucción total del hogar prevé una ayuda máxima de 15.120 euros, por ejemplo. Errekondo espera -como ya ha sucedido en otros casos, "con la erupción de El Hierro y el terremoto de Lorca", recordó-, que Madrid amplíe el paquete de ayudas.

La Diputación explicó que las nuevas subvenciones completarán las ayudas previstas en el Real Decreto y cubrirán otro tipo de desperfectos en conceptos no incluidos en la resolución como los daños ocasionados en huertas y caminos rurales. "Se han registrado daños de especial consideración en las infraestructuras hortícolas del territorio", avanzó Errekondo, "donde se han perdido cosechas enteras. Por regla general, estos cultivos carecen de seguros", subrayó.

La diputada de Administración Foral y Función Pública, sin embargo, no quiso especificar qué ayudas otorgará la institución foral o directamente si destinará alguna cuantía para los damnificados de Martutene y Txomin, los barrios donostiarras más afectados por las lluvias, y del resto de municipios del territorio que hayan sufrido perdidas.

"La Diputación, en este momento, no ha abierto ninguna línea de subvención porque queremos saber hasta donde van a llegar las ayudas del Gobierno estatal y hasta donde van a llegar las ayudas del Gobierno autonómico. A partir de ahí decidiremos que ayudas vamos a conceder", señaló Errekondo.

La diputada, acompañada de la portavoz de la institución foral, Larraitz Ugarte, detalló el dispositivo de emergencias desplegado los días 5, 6 y 7 de noviembre, cuando se produjeron las inundaciones. "Todo es mejorable, todos los servicios que se puedan dar son, efectivamente, mejorables, más recursos, que sean más eficientes, etcétera. Pero pensamos que el servicio prestado fue adecuado", aclaró. "Ahí están los resultados, las inundaciones han sido las que han sido. Era inevitable que ocurriera. El servicio que se ofreció a esta gente fue bueno porque los daños que han sufrido así nos lo hacen pensar", continuó Errekondo a pesar de que 30 familias de Txomin han tenido que ser realojadas tras perder sus viviendas.

La Diputación de Gipuzkoa mantuvo a lo largo de la semana pasada una Comisión Especial de Seguimiento, encargada de evaluar los desperfectos causados por el agua y coordinar las actuaciones de los departamentos. Los bomberos realizaron, después de los primeros días, 12 actuaciones "para achicar agua en empresas y en viviendas", detalló Errekondo. Además, el área de Infraestructuras Viarias atendió una veintena de avisos "por barro y piedras en la calzada, deslizamiento de tierras y árboles que provocaban peligro". La A-15, la autovía de Navarra, sigue siendo la única vía del territorio todavía afectada por las fuertes lluvias. La salida desde Berastegi dirección San Sebastián permanecerá cerrada por riesgo de desprendimientos hasta que se realicen los trabajos de estabilización de la ladera, que, según apuntó Errekondo, "previsiblemente finalizarán el 28 de noviembre". El Departamento de Política Social, por su parte, atendió a 58 personas afectadas por realojos. La Diputación también hizo inventario de las propiedades de la propia institución afectadas, además de los daños ocasionados en Arteleku, la lluvia provocó "pequeños desperfectos" en el convento de Santa Teresa y en el Museo Naval, entre otros.