Izagirre reconoce "carencias" en el plan contra las inundaciones
El alcalde de San Sebastián, Juan Karlos Izagirre, de Bildu, reconoció ayer que existen "carencias" en el plan de emergencias desplegado por el consistorio ante las inundaciones del pasado domingo. El regidor prometió solucionar las posibles deficiencias al tiempo que aseguró que el protocolo "se puso en marcha desde el principio y se cumplió". Izagirre compareció ayer ante los medios después de haberse reunido a lo largo de la semana con los vecinos de los dos barrios de San Sebastián que resultaron más castigados por el temporal: Martutene y Txomin.
El alcalde aseguró estar dispuesto a hacer "autocrítica" y subsanar aquellos aspectos del plan diseñado que han provocado que los vecinos se sintieran "desprotegidos y abandonados", según le transmitieron los propios afectados en los encuentros del pasado miércoles y jueves.
El Ayuntamiento aclaró que quedan 30 personas que todavía no han podido regresar a sus viviendas, al tiempo que ha decidio adelantar el derribo de varias viviendas en Txomin y realojar a sus propietarios.
El Ayuntamiento explicó que ha destinado una partida de 500.000 euros para acometer unas primeras obras. El dinero se destinará en la mejora de la red fluvial de Txomin.
Izagirre añadió que además empujará al resto de instituciones con competencias en la materia al desarrollo del plan de acondicionamiento del Urumea. Con la medida, el Ayuntamiento busca dar una solución definitiva a unos barrios que todos los años, aunque sea en menor medida, sufren algún tipo de inundación, tal y como ha prometido a los vecinos a lo largo de la semana.
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