_
_
_
_

El fiscal pide prisión para Anglada por agredir a su hijo

El líder de PxC también podría cumplir una orden de alejamiento

La presunta agresión del líder de Plataforma per Catalunya (PxC), Josep Anglada, a su hijo, denunciada por este hace unas semanas, le podría costar cara al líder de la formación xenófoba. La fiscalía imputa a Anglada un delito de lesiones en el ámbito familiar y pedirá 10 meses de prisión y una orden de alejamiento de un año durante el cual Anglada no podría acercarse a menos de un kilómetro del domicilio de su vástago. En la práctica, al vivir padre e hijo bajo el mismo techo, si la sentencia judicial considerara probados los hechos y aceptara la petición fiscal, Anglada no podría vivir en su propia casa.

Las consecuencias para el líder de PxC no acabarían aquí. El domicilio familiar, situado en la calle de Verdaguer de Vic, está ubicado a menos de un kilómetro del Ayuntamiento. Así, si Anglada, que es concejal, acudiera a los plenos del Consistorio, estaría violando la orden de alejamiento.

Los hechos por los que se juzgará a Anglada, que la fiscalía da por probados, ocurrieron el pasado 21 de octubre por la noche. El hijo de Anglada acudió a los Mossos d'Esquadra de Vic para denunciar que su padre le había pegado e insultado en el transcurso de una discusión familiar. Anglada reconoció en ese momento la existencia de la discusión con su hijo, que se habría originado a causa de un gato, pero la calificó de intrascendente y la situó fuera del ámbito político.

El juicio, que se tramita mediante el sistema de justicia rápida, se celebrará el 24 de noviembre, cuatro días después de las elecciones generales, en las que Anglada ha presentado candidatura y opta a entrar en el Congreso.

Los problemas de Anglada con la justicia no terminan aquí. El líder de Plataforma per Catalunya está a la espera de la resolución de un juicio por supuesta incitación al odio racial mediante la distribución de unos panfletos con mensajes xenófobos durante la campaña electoral de las municipales de 2007.

En 2008, Anglada fue condenado por agredir a un joven en la puerta de una discoteca a la que había ido a recoger a su hijo. En aquella ocasión tuvo que pagar una multa de 150 euros por una falta de injurias y estar permanentemente localizable durante seis días. Un año más tarde, el Juzgado de Instrucción número 5 de Vic condenó a Anglada a pagar una multa de 450 euros, en este caso por haber propinado un puñetazo a un menor que le había llamado "facha".

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_