La Ley de Juventud promoverá medidas para la emancipación

El proyecto de Ley de Juventud que el Gobierno ha enviado al Parlamento prima, sin especificar acciones concretas, las medidas que faciliten a los jóvenes su emancipación con una política que afectará a los distintos departamentos del Ejecutivo y a Diputaciones y Ayuntamientos. El proyecto prevé concentrar la planificación y la ejecución de las medidas relacionadas con la juventud en un nuevo organismo, el Instituto Vasco de la Juventud, que dependerá de Lehendakaritza.

"Superamos una visión tradicional centrada en el tiempo libre y pasamos a una doble fórmula que, por un lado, contempla el disfrute de la condición juvenil y, por otro, pone a su disposición los mecanismos para la emancipación y el acceso a la condición adulta", explicó ayer en Bilbao la consejera de Cultura, Blanca Urgell, al detallar el contenido del proyecto.

La consejera destaca que supera la visión tradicional centrada en el tiempo libre

Euskadi llega con retraso a la ordenación legal específica de las políticas de juventud. Será la última comunidad autónoma en contar con una ley de este tipo, lo que le ha permitido inspirarse en otras legislaciones, como la catalana. El primer paso para acabar con este vacío se dio el pasado 7 de octubre cuando el Consejo de Gobierno aprobó el proyecto de ley. Trasladado al Parlamento, será debatido en la Comisión de Cultura antes de fin de año. Urgell prevé que pueda quedar definitivamente aprobado en marzo próximo.

La consejera defendió el carácter transversal de la ley que supere una simple suma de acciones centradas en la juventud por parte de los distintos departamentos como hasta ahora está ocurriendo. El nuevo instituto será el organismo encargado de la planificación, la coordinación y la evaluación de las acciones relacionadas con este tramo de edad. El principal instrumento con el que le dotará la ley será el Sistema Vasco de Juventud, que reunirá las actuaciones de los distintos niveles administrativos y delimitará su actuación en función de sus competencias.

Este Sistema recogerá las medidas y proyectos concretos que darán forma a la filosofía de la ley en el estímulo de la emancipación de los jóvenes y la oferta de una serie de servicios específicos.

El proyecto de ley considera personas jóvenes a las que tienen entre 12 y 30 años, aunque los límites de edad serán flexibles para adaptarse a los distintos aspectos relacionados con la vivienda, la salud, el empleo, la formación o la relación con el mundo. El director de Juventud, Natxo Rodríguez, señaló que la franja de edad a partir de la que los menores se considerarán jóvenes coincide con la entrada en educación secundaria.

La creación del Instituto Vasco de la Juventud, adscrito a Presidencia, siguiendo el modelo de organismo de carácter transversal que tiene Emakunde, supondrá la eliminación de la Dirección de Juventud, dependiente de Cultura. El nuevo organismo no llevará consigo un incremento del volumen de la Administración, ya que heredará el personal y los medios materiales de dicha dirección.

El proyecto de ley no cambia las funciones del Consejo Vasco de la Juventud, en el que están representados las asociaciones y organismo juveniles. Urgell destacó que "el mayor órgano de representación de la juventud organizada" seguirá siendo interlocutor del Gobierno.