Los falsos amigos del 15-M
Casi todos les hacían la ola. Eran tan majetes con sus rastas, sus cartelones con verdades como puños y sus rostros juvenilmente inmaculados. El Gobierno de Rubalcaba les precisaba entonces para no hundirse del todo en las municipales. El PP temía que aguaran su primer baño de poder. Y el resto -nacionalistas y sus concubinas- no querían contrariarles. Así que les siguieron la corriente o les otorgaron la gracia de ignorarles. Eran los chicos del 15-M.
Pero han llegado las elecciones generales. Unos y otros (que son los mismos, según algunas fuentes) se juegan el pan y la pensión máxima que van emparejados al escaño, y el iPad y el iPhone que les regalan como promoción de alta. Así que se acabaron las bromas. "A los del 15-M, ni agua. No vaya a ser que estos perroflautas astrosos se monten una lista y nos fastidien el tenderete", se dijeron los amantes de la ley D'Hont, que permite que al PSOE o al PP les basten en torno a 60.000 votos para obtener un diputado frente a los más de 300.000 que precisan partidos como IU y UPyD.
"Que sí, que sí, chavalotes, que vamos a cambiar la ley para que se cumpla eso de 'un hombre, un voto', como pedís", les tranquilizaban cuando acampaban en la Puerta del Sol. Y se pusieron manos a la obra. Recién concluidos los comicios del 15-M, salió a la luz un artículo del pacto ignominioso al que habían llegado en enero PSOE, PP, CiU y PNV para reformar la ley electoral, que exigía la presentación de avales para las formaciones minoritarias, lo que, en la práctica, invalidaba muchas candidaturas, dados los escasos medios para recabar las firmas.
Para que no haya sustos, quedan excluidos de esa obligación los firmantes del pacto, y los que ya están subidos al carro (IU, UPyD, BNG, CC y el resto de representados en el Parlamento actual). Democracia selectiva a cargo del contribuyente.
A los indignados les han prohibido ahora hasta que se manifiesten en Sol. Así que han tenido que refugiarse en internet, la cueva cibernética que alumbró su nacimiento. Están acampados otra vez en las redes sociales. Piden #DemocraciaRealYa y, sobre todo, que #nolesvotes para que no salgan #niPPniPSOE.
Ingenuos del 15-M, evitad a los falsos amigos. Leed a Danton, pero reparad inmediatamente en la biografía de Robespierre y, más aún, en los edictos de los que le mandaron a la guillotina. La revolución no es como pensáis una damisela virgen, impresionable por sonetos amorosos. Más bien es una vieja airada de humor cambiante, con las manos ensangrentadas de los cascotes de las barricadas y de las puñaladas de los que se confesaban sus amantes.
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