¿Día Mundial del Hambre, cuándo?
El pasado domingo 16 de octubre fue el Día Mundial del Hambre, que oficialmente se denomina Día Mundial de la Alimentación. ¿Cuánta gente lo sabía? Bien poca. Y me incluyo. Me he enterado después leyendo el periódico, gracias a una noticia en la que se manifestaba la indignación porque no se había difundido en los medios de comunicación.
El hambre no vende. El número de personas que mueren por desnutrición no tiene morbo. Y eso que estamos hablando de una cifra de 22.000 personas que mueren diariamente de hambre o de enfermedades relacionadas con el hambre. Pero eso no llama. No provoca. Solo puede convertirse en noticia si lo llevamos a un extremo sensacionalista e intentamos encontrar, en una desgracia, el morbo. Como no es una cosa que nos afecte de cerca, como no salimos perjudicados, no le damos importancia. Ni tan solo nos acordamos. Necesitamos una lección de humanidad y honestidad. Necesitamos dejar de vernos como el ombligo del mundo. Necesitamos darnos cuenta que hay cosas más importantes en la vida que nuestras banales -a veces- preocupaciones.