Las Diputaciones inician acercamientos en torno a la reforma tributaria
Bilbao considera factible un "ámbito de acuerdos mínimos" a corto plazo
La reforma fiscal se está convirtiendo, en un escenario de crisis y reducción de la tributación, en uno de los principales laboratorios de prueba de la geometría variable de acuerdos y la cohabitación forzadas por los resultados del 22-M, que han dejado cada una de las principales instituciones en manos de un partido distinto. Las diferentes propuestas sobre la mesa abrieron inicialmente alianzas transversales tanto a la izquierda como a la derecha del espectro ideológico y económico: los socialistas con Bildu y Aralar a un lado, defensores del aumento de la presión fiscal; peneuvistas y populares al otro, mucho más reticentes a las subidas de impuestos, cuando no claramente contrarios en ciertos casos.
Representantes de las tres instituciones forales mantienen reuniones fiscales
Gipuzkoa defiende conseguir la máxima "sintonía y armonización"
Sin embargo, a dos días de una reunión crucial del Consejo Vasco de Finanzas, esos bloques muestran ciertos movimientos en las Diputaciones, las principales concernidas en tanto que recaudadoras de impuestos. El diputado general de Bizkaia, José Luis Bilbao, aseguró ayer en una entrevista en ETB que a corto plazo puede darse un "ámbito de acuerdos mínimos" entre las tres instituciones en materia de política tributaria.
Bilbao apuntó más a los terrenos de posible desacuerdo que a los puntos de cercanía. "Creo que compartimos la reflexión de que hay determinadas figuras tributarias que requieren un análisis más profundo y tranquilo durante 2012, como entrar al Impuesto de Sociedades y al IRPF", con su complejidad y relaciones mutuas, apuntó el máximo mandatario vizcaíno. "Podemos llegar a acuerdos en algunas materias, aunque en otras, no", asumió.
La Diputación de Gipuzkoa, en manos de Bildu, presentó públicamente el sábado sus propuestas para la reforma fiscal, que incluyen llevar al 50% el tipo máximo del IRPF, iniciativa que, de entrada, chocaría con las políticas que defienden PNV (Bizkaia) y PP (Álava). Bilbao buscó aquí un discurso sin aristas y se limitó a decir que "parece que [Gipuzkoa] quiere marcar otro perfil. Veremos en qué queda todo eso".
También sobre el Impuesto de Sociedades las posiciones de partida son distantes. Bildu ha votado con los socialistas una propuesta en las Juntas de Gipuzkoa que deja como están sus tipos actuales: 28% en el tramo general y 24% para las pymes. En cambio, el PP ha presentado ya una proposición de norma en Bizkaia, que llevará a los otros dos territorios, para la que va a buscar el consenso con el PNV y en la que plantea bajar ambos cuatro puntos.
Bilbao indicó que representantes de las tres instituciones forales están manteniendo reuniones sobre fiscalidad, aunque no concretó si a tres bandas o de dos a dos. Álava había limitado sus contactos iniciales a Bizkaia, en los que todavía existen diferencias, según fuentes populares alavesas. Otras fuentes del PP señalaban cuando comenzó el debate de la reforma fiscal que su pretensión era buscar acuerdos institucionales con el PNV, sin contar con Bildu. De hecho, las dos veces que el presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti, ha planteado públicamente en los últimos 15 días un gran pacto fiscal su oferta se ha dirigido a socialistas y peneuvistas, recalcando que dejaba a la coalición fuera de la propuesta.
El diputado general vizcaíno, quien en materia fiscal, como en otras, ha mantenido los principales enfrentamientos desde el rincón foral con el Gobierno, hizo un explícito canto al consenso, destacando que en este asunto los tres territorios deberían "ir de la mano". "Una cosa es discutir, hacer propuestas, y otra que cada uno vaya a su aire", sostuvo, ya que la coordinación en materia fiscal "es un valor en sí misma, siempre y cuando sea posible".
Desde Gipuzkoa se repitió esa apuesta por lograr la máxima "sintonía y armonización" en esta cuestión con los otros territorios. Su portavoz foral, Larriz Ugarte, rechazó precisar con qué postura se va a sentar su institución en el Consejo de Finanzas del viernes, pero insistió en "intentar lograr la mayor armonización y una sintonía con el resto de Diputaciones". Confirmó que Gipuzkoa está "en relación con el resto de Diputaciones para ver qué medidas fiscales" pueden sacar "entre todos" adelante, aun recordando que cada institución foral goza de sus propias competencias.
El diputado general alavés, Javier de Andrés, con su institución ante un agujero de 896 millones al que no tiene capacidad de hacer frente, no habló en su comparecencia semanal de estos acercamientos. Y reiteró que Álava no plantea subidas del IRPF, sino ventajas para las familias y para las empresas que generen empleo o sostengan sus plantillas.
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